Cálido romance de una pareja despareja
La carrera de Martín Bossi se basa en su innata habilidad para copiar y caricaturizar gestos, voces y actitudes. Aquí la pone en práctica con su Lucas, un comediante del under que dicta clases de actuación. Entre sus alumnos se halla Guadalupe, una joven y exitosa ejecutiva de un buscador de Internet que sufre a la hora de componer un personaje en clase. El choque de los mundos que representan Lucas y Guadalupe será explosivo y pronto iniciarán un romance. Los desencuentros y las muchas discusiones entre ellos se filtrarán, sin quererlo, en las redes sociales, lo que creará un gran debate.
El director y guionista Emilio Tamer logró en éste, su primer largometraje, crear una fábula porteña. El micromundo del teatro independiente aparece en cada una de las secuencias con ese aroma de esfuerzo y de pasión. Rostros reconocidos de la TV asoman en algunas escenas para entusiasmar al público, aunque lo que aquí no necesita de caras populares y alguno que otro chiste propio de la pantalla chica. Bossi aporta una enorme convicción a su papel de profesor adusto, mientras que María Zambarbide logra imponer su simpatía a esa mujer que descubre la pasión del escenario. Impecable en sus rubros técnicos, el film logra lo que se propuso: entretener con buenas armas.