Un film más (con el sello Leigh)
El vaso medio lleno o medio vacío. Más de lo mismo o "una nueva incursión en el universo personal de un autor". Esas contradicciones, dilemas e interrogantes se plantean ante este trabajo de Mike Leigh.
Tragicomedia dividida en cuatro episodios (las diferentes estaciones del año al que alude el título) que tienen como protagonistas a diversos personajes, varios de ellos dominados por la soledad, la angustia, la incomunicación y el deseo de encontrar el tan anhelado amor. De eso se trata el más reciente film del aclamado director de La vida es formidable, Naked, Simplemente amigas, Todo o nada, Secretos y mentiras, El secreto de Vera Drake y La felicidad trae suerte.
Con una apuesta casi teatral (prácticamente todas las escenas se desarrollan en interiores) y con el aporte de un elenco siempre convincente encabezado por Jim Broadbent, Imelda Staunton, Lesley Manville y Ruth Sheen, el director británico construye una película "trascendente" (que recibió críticas laudatorias en todo el mundo y hasta fue nominada al premio Oscar al mejor guión original), pero que para mi gusto se repite un poco (hay algo del síndrome de fatiga de Woody Allen) y queda bastante lejos de las cimas de una filmografía que le ha permitido ganar tanto el León de Oro en Venecia como la Palma de Oro en Cannes.
Más allá de los reparos, queda claro que el cine humanista y querible de Leigh siempre ofrece elementos nobles y sensibles que el público argentino viene reconociendo desde hace más de dos décadas. Un "romance" que no debería cortarse con Un año más.