Es un thriller psicológico, con intriga y suspenso, que cuenta con la buena interpretación del actor francés Pierre Niney (27), se van generando buenos climas, acompaña bien la banda sonora, con escenas de situaciones llenas de tensión con toques similares a Alfred Hitchcock y Claude Chabrol. Tiene un buen arranque pero no se llega a sostener y termina desplomándose. Entretiene.