Un loco viaje al pasado volvió a reunir al guionista de Alta fidelidad, Steve Pink, con John Cusack.
En este caso Pink debutó como director en una buena película que brinda una comedia del estilo de ¿Qué pasó ayer? con la particularidad que esta tiene elementos fantásticos.
El director presenta rápidamente a los protagonistas y enseguida se mete de lleno en el conflicto principal, que tiene la gracia que todo se desarrolla en 1986, cuando los personajes principales viajan al pasado.
Es una película nostálgica ideal para quienes vivieron su adolescencia en los ´80.
La película está plagada de referencias a todo lo que era la cultura de esa década.
Desde películas como Red Dawn o la serie de Johnny Depp, Comando Especial hasta la música de Poison, el humor juega mucho con este tema.
Inclusive hay un cameo de Chavy Chase, quien para 1986 era uno de los actores mejores pagos que hacía exítos taquilleros y hoy participa en filmes que casi ni llegan a los cines.
Otra miembro del elenco que se destaca en un pequeño papel es Crispin Glover (Volver al Futuro), quien acá tiene un rol secundario y la verdad que debieron darle un rol más importante porque es genial para este tipo de propuestas.
Un loco viaje al pasado es una comedia retro que emula lo que eran los filmes de este género en los ´80, donde la referencia a Volver al Futuro es más que obvia por los inconvenientes que enfrentan los protagonistas.
La verdad que la película es más entretenida de lo que vendían los trailers.
John Cusack es quién se carga toda la producción al hombro y representa lo mejor de este estreno.
No es un peliculón memorable pero después de ver lo último de Adam Sandler esto por lo menos entretiene y no te hace tirar la plata en el cine.