Cerrá y tirá la llave
Los primero minutos de esta película promenten. Todo parece dirigirse hacia un soft porno tecnológico, áspero y transgresor. Pero no.
La expectativa se diluye rapidamente. Lo que parecía una buena producción da paso al cartón pintado, los efectos básicos y un puñado de pésimas actuaciones, con Birabent a la cabeza. Se salva Belloso, porque su talento explota más allá de todo. En esta historia interpreta a Patricio Podestá, un exitoso productor televisivo, quien debido a un traumático hecho de inseguridad decide aislarse en un departamente equipado con lo último en tecnología aplicada a la seguridad.
Sin embargo es un conductor de programas de chimentos el que se convierte en el mayor enemigo de Podestá y lo expone públicamente.
El hombre alienado que pretende con la tecnología obtener la seguridad que su propia mente no le da es un tema interesante para abordar. También lo es el los medios y participación en la vida privada de las personas públicas. Lamentablemente todo queda en una crítica de estudiantina, sin rigor artístico alguno.