Inspirado en la historia, y en el best seller, del periodista Benjamin Mee, Cameron Crowe vuelve al cine con la titánica misión de mantener y reconstruir una familia tras la inesperada muerte de la madre de los niños y esposa del ahora hombre orquesta que trata de satisfacer todas las necesidades de los más disímiles flancos.
Con la intención de comenzar de cero y tratar de borrar el dolor del día a día, Benjamin decide vender la casa en la que se criaron sus dos hijos y adquirir, a un precio de remate, un zoológico casi en ruinas y hacerse cargo de parte del plantel estable del mismo. Con la doble responsabilidad de lograr que su pequeña familia se adapte al nuevo contexto y que los empleados puedan cobrar su sueldo regularmente todos los meses, Mee emprende la misión de reciclar el zoo y dejarlo a punto para las próximas vacaciones.
Aunque la tarea no será nada sencilla, allí se encuentra toda la convicción de Matt Damon para ponerse al hombre el protagónico casi excluyente de esta cinta, en la que Scarlett Johansson vuelve a recuperar parte del carisma extraviado en sus últimos trabajos y en donde Elle Fanning y la pequeña Maggie Elizabeth Jones terminan quedándose con los momentos más auténticos y emotivos.
Un filme ideal para cerrar una exitosa temporada cinematográfica en nuestro país.