Antes de iniciar la entrada, Un feliz año nuevo para todos nuestros lectores!. Que el 2013 les traiga más y mejor cine con sus seres queridos y que sigan siendo nuestros seguidores!.
Y como primer entrada, mi última película del 2012: Life of Pi, del director Ang Lee y basada en el libro de Yann Martel. Protagonizada por Suraj Sharma (debutante), Irrfan Khan (Slumdog MIllionaire) y nuestro querido Richard Parker.
La verdad es que en ésta oportunidad no nos vamos a morir en alabanzas y halagos para ésta película. Si, el apartado visual es espectacular y el 3D es probablemente de los mejores presentados junto con Avatar de Cameron; hay que diferenciar entre efectos de explosiones y demás cosas como tipo Los Vengadores, y los efectos de la naturaleza como Life of Pi. Lo primero emociona, pero lo segundo deleita. Aunque también habrá que mencionar que por ahí hay momentos en los que Richard Parker no se ve tan natural como en otras ocasiones. No hay que confundir una película "mala" con algo que simplemente no nos gustó. Ang Lee nos transporta a un mundo de fantasía, de supervivencia del más apto, de magia. A los lugares olvidados de la tierra y de nuestra mente.
Piscine es un chico hindú común que sufre por lo extraño de su nombre. Y conforme crece con sus padres, dueños de un zoológico, aprende de la Fe. Y de la Fe como base para cualquier creencia: no importa en lo que creas siempre y cuando tu Fe sea lo suficientemente fuerte para defenderla ante cualquier situación. Un día, viajando hacia américa, el barco donde viajaba su familia y los animales naufraga, dejándolo a la deriva con unos cuántos animales, entre ellos un feroz Tigre de Bengala. Y nos lleva a un viaje místico, que pone en duda todas las creencias del muchacho, toda su experiencia (poca en realidad) sobre el cuidado de los animales y sobre la vida en sí misma.
Personalmente no me pareció la "maravilla" de la que todo el mundo habla pero tampoco vamos a dejar de reconocer su gran historia y sus maravillosos aspectos técnicos. Creo que el problema con ésta película realmente es alargar innecesariamente el relato y jugar entre la delgada línea del drama y la comedia sin dejar de lado la propia autocrítica a la naturaleza humana y lo mucho que se ha alejado de la naturaleza animal. ¿Realmente somos tan diferentes a ellos o es sólo que nos sentimos tan superiores que todo lo que nos parece "extraordinario" preferimos dejarlo a un lado y aferrarnos a lo cotidiano, a lo común?. ¿Es nuestra Fe en la religión (y en realidad, la Fe en cualquier persona u objeto) tan poderosa para permitirnos sobrevivir o es tan frágil que puede ser quebrantada con cualquier prueba? Quizá algunos me acusarán de loco, pero Life of Pi me dejó el mismo mensaje de la tan odiada Sucker Punch (Mundo Surreal): Uno elige creer en lo que quiera, uno elige ponerse barreras o romperlas. La mente es tan poderosa que puede crear mundos más allá de lo que a todos les asusta. Y al final, esas personas, a las que muchos llaman "locas", son en realidad las más felices, porque su Fe es más poderosa que les permite ver más allá, les permite ser superiores, y les permite ser felices a su propia manera. Al final, estamos ante una contendiente al oscar a mejor película. Recomendable pero sin ir con altas expectativas.