Francisco Bendomir imagino este argumento con algunos ingredientes personales y recuerdos de su infancia. Pero lo que realmente llama la atención de esta comedia muy bien lograda y con elementos de animación, es que tiene una mirada crítica sobre el tiempo que nos toca vivir, donde casi todo se comparte vía redes sociales y es más importante lo que sucede con cada hecho registrado que el hecho en sí. Un casting que termina mal, delirante, porque la protagonista tiene la mala costumbre de vomitar en momentos culmines de su vida, deriva en una atracción fatal en las redes. Por eso ella decide suicidarse, aprendiendo como hacer el nudo necesario para colgarse, por un tutorial de internet…. Un simple ejemplo de lo banal y lo trágico mezclado con voyerismo, odio e incomunicación entre padres e hijos, más la potencia de una adolescente que se lastima con un cuchillo adrede para tener más likes. Intensa y divertida, con un muy buen trabajo de arte y actores realmente entregados e intensos, en especial la pequeña Lola Ahumada y Andrea Carballo. Acompañan bien María Rosa Fugazot, Javier de Pietro y Pablo Greco. Inteligente y graciosa comedia que nos refleja.