El valor de la amistad desde una mirada femenina.
Lo mejor que puede vivir cualquier persona es encontrar un buen amigo, porque la amistad, es un sentimiento único, y uno tiene la suerte de elegirla, en cambio como se suele decir uno a la familia la hereda.
En esta historia conocemos a Gabriela (Julieta Cardinali), está casada con Marcelo (Fernán Mirás) ellos aparentemente viven felices, tienen un negocio; ahora él necesita viajar a Mendoza de urgencia porque su tía se encuentra enferma y ella queda a cargo de todo.
Pero la vida de Gabriela se ve afectada cuando aparece una ex compañera de colegio Felisa (Leonora Balcarce), fueron buenas amigas, tuvieron muchas cosas en común hasta les gustaba el mismo chico, pero una serie de hechos desafortunados las fueron separando.
Después de quince años vuelven a reencontrarse y Gabriela vive tres días terribles, su negocio es asaltado y resulta herido uno de sus empleados, su cuenta bancaria se encuentra sin saldo, problemas con su auto, no logra comunicarse con su marido, se siente engañada por su este cuando revisa el chat y sus cosas; y todos hechos suceden con la aparición de Felisa.
Casualmente una serie de ese tipo de sucesos del pasado las fueron separando, Gabriela y sus padres dicen que Felisa acerca la mala suerte y la desgracia; cuántos de nosotros no conocimos alguna vez una persona “yeta”, inspirado en esto nació “¡Jettatore!” de Gregorio de Laferrère, que fue representada en: teatro, televisión y cine; como la película “La suerte está echada, 2005” de Sebastián Borensztein con Marcelo Mazzarello casualmente el nombre de su personaje era Felipe.
Las situaciones que muestra el film son muy reiterativas, pocas situaciones te sacan una sonrisa, forman una muy buena dupla entre Cardinali y Balcarce, una lástima que muchos actores estan desaprovechados: Roberto Carnaghi, Rita Cortese, Fernán Mirás, Adela Gleijer y Juan Manuel Tenuta, un flojo montaje y la música no ayuda para nada. El tema se podría haber explotado mejor, una pena.