Una familia espacial, una nueva propuesta animada que llega a los cines.
Es difícil encontrar largometrajes animados que escapen a la estética y temática de los grandes estudios. De la mano del creador de la saga de Tadeo (desconocida para las salas argentinas) llega Una familia espacial, la historia de Mike, un niño que en un intento de acercar a su padre y su abuelo, termina en medio de una cruzada de los Estados Unidos por impedir que un malvado magnate reescriba la historia al mismo tiempo que monopoliza los recursos energéticos de la Luna.
La película es una muy básica fábula sobre las relaciones humanas, que no genera demasiado interés para los adultos pero que tiene todos los ingredientes para entretener a los chicos. Un villano exageradamente carismático al mismo tiempo que malvado, efectos especiales y escenas de acción y emoción por doquier.
Aunque palidezca ante las producciones a las que estamos acostumbrados, Una familia espacial es un producto que está por arriba de la media y que, sin generar el fanatismo que los grandes personajes de Disney o Fox pueden lograr, lograra atrapar al público infantil que se acerque a las salas.
Para llevar a los más chicos en lo que queda de estas vacaciones de verano, y asegurarse que se diviertan al mismo tiempo que se emocionan con Una familia espacial.