Escrita y dirigida por Ken Scott, Una familia numerosa (Delivery man) es la remake de Starbuck (2011), también del director. El resultado es una comedia que apenas hace reír.
Soy tu padre
David Wozniak (Vince Vaughn) trabaja como repartidor de carne en la empresa de su familia. Es un hombre que no tiene muy encaminada su vida, no termina nada de lo que se propone, está endeudado y ni siquiera puede cumplir con su trabajo. Su novia (Cobie Smulders), está bastante cansada de él por su falta de compromiso y cuando descubre que está embarazada, decide dejarlo afuera porque no puede contar con él. Un día descubre que la clínica de fertilidad en la que él donó esperma 20 años antes, usó de manera excesiva su esperma y que tiene un total de 533 hijos. Y esto no termina acá, 142 de estos hijos quieren conocer la identidad de su padre. Con ayuda de Brett (Chris Pratt), su amigo y abogado, David busca la manera de hacerle frente a esta extraña situación. Sus “nuevos” 142 hijos cambiarán para siempre su vida, quien verá esto como una oportunidad de tomar las riendas de su vida y aprender a ser padre.
Un papá genial
Lo mejor de la película es Chris Pratt (te sigo desde Everwood), el amigo de David. Tiene mucha chispa y en este papel se destaca y logra las mayores carcajadas. Las escenas con sus hijos son las mejores. El resto del elenco está correcto, pero tampoco brilla, son papeles con pocos matices.
Una cosa que me jugó en contra a la hora de ver la película fue el cambio de tono. Al comienzo tenemos una comedia muy buena, pero enseguida la película vira hacia la comedia dramática y se disuelve el tono jocoso inicial. Y ahí pierde el encanto De tanto en tanto tiran un gag, y listo. Se vuelve melodramática, de una manera muy cursi. La cuestión de la paternidad de David está tratada de manera simplista y abundan los clichés en las escenas que comparte con sus hijos. El guión a mi parecer está un poco flojo de papeles, toda la situación legal de los hijos queriendo saber la identidad del padre me resultó bastante inverosímil, pero tampoco quiero adelantar elementos de la trama. Por otro lado, hay una gran cantidad de subtramas que no se terminan de desarrollar, por el simple hecho de que son demasiadas historias para abarcar. Lo peor, todo se resuelve mágicamente, todos están felices y se emocionan, hay un exceso de sentimentalismo tremendo.
Conclusión
Una familia numerosa es una película excesivamente sentimentalista, con un guión flojo y muy pocos toques de comedia. No faltan los golpes bajos ni la moraleja final en un film que abre demasiadas líneas narrativas y termina tratándolas de manera superficial. Parte de una premisa interesante, pero se convierte en un producto políticamente correctísimo, meloso y cursi, repleto de lugares comunes.