Los Pibes es el tercer largometraje de Jorge Leandro Colás, integrante de la Competencia Argentina del 30° Festival Internacional de Cine de Mar del Plata (su ópera prima, Parador Retiro, ganó la Competencia Argentina en la edición de 2008), un documental donde el foco está puesto en los cazatalentos del Club Atlético Boca Juniors. Camino a la Gloria. Los PibesCada año, aproximadamente cuarenta mil chicos se prueban para jugar en las inferiores del Club Atlético Boca Juniors. Los “captadores” son los cazatalentos del club, se encargan de evaluar el juego de estos chicos y de decidir quiénes ingresan a las inferiores del club. Son hombres con años de oficio que saben detectar rápidamente el talento en los jóvenes jugadores, con unos pocos minutos ya advierten quiénes se destacan. Y si un chico es bueno con la pelota, los reclutadores no dudarán en hacer todo lo posible por ficharlo en Boca, aunque eso incluya “robárselo” a otro club más pequeño. En este documental, el punto de vista reside en los captadores, su trabajo y sus anécdotas en el mundo del fútbol, dejando de lado los casos particulares de los chicos y sus sueños de gloria. El registro del largometraje de Colás va desde el tedio de recibir a los cientos de chicos y sus padres agolpados en la entrada del predio de Boca, llenos de ansiedad y malestar, hasta el trabajo de oficina, los viajes a distintos pueblos y el trabajo en las canchas de los captadores. La cámara logra meterse en la intimidad de los captadores y también está atenta a los chicos, quienes mantienen breves conversaciones en los momentos de espera en sus pruebas. Los Pibes del título no son los pequeños aspirantes a jugadores de fútbol, son los captadores, a quienes vemos divertirse y bromear como chicos. Tampoco son santos, sus intereses los llevan a “robar” jugadores y no les tiembla el pulso a la hora de decirle a un joven que a sus 18 años ya está grande para probarse en Boca. Lo más valioso de este documental es poner el foco en un protagonista colectivo, y que sea en estos hombres y no en los chicos y sus sueños de triunfar, situación que ya está muy vista en cine y televisión. Conclusión. El director de Parador Retiro logra con Los Pibes un documental muy amable, que retrata con originalidad ese pequeño universo donde convergen el fútbol infantil y los cazatalentos. Con una fotografía impecable y una cámara que logra meterse de lleno en la rutina de los captadores, la película de Jorge Leandro Colás demuestra que tiene un registro muy preciso del método de trabajo de estos hombres.
Crítica realizada durante el BAFICI [17]. Los exiliados románticos, del español Jonás Trueba (Los ilusos), es una de las películas que integran la Competencia Internacional del BAFICI [17]. El Viaje Es verano en Madrid y Francesco, Vito y Luis deciden emprender un viaje en una camioneta rumbo a Francia. No parecen haber un motivo particular por el cual viajan. Quizás, como dicta el trailer de la película, este sea el último sueño de juventud de estos tres amigos. En su melancólico periplo por Toulouse, París y Annecy se reencuentran con viejos amores, descansan y conocen gente. La camioneta, comprada por la madre de Luis para recorrer Europa, es el medio de transporte y hospedaje de estos tres amigos. La música de Miren Iza los acompaña durante los cientos de kilómetros de aventura. Madrid – París El título de la película hace referencia al libro de E.H. Carr Los exiliados románticos. Pero el título le queda enorme al film de Trueba. Es una película lavada, tibia, no les pude creer prácticamente nada a los protagonistas. Sin embargo, tiene un par de escenas rescatables y hasta tiernas, como aquella escena de Luis en los Jardines de Luxemburgo en sus esfuerzos por conquistar a su enamorada francesa, con toda su timidez y torpeza expresadas con mucha naturalidad.Las mujeres ocupan un lugar secundario en la película, pero Trueba es autocrítico respecto a este punto y sus personajes femeninos hacen referencia al papel que ocupan. La música, a cargo de Miren Iza y Tulsa (la banda liderada por Iza), tiene un lugar central en Los exiliados románticos. Los tres amigos asisten a las presentaciones de la cantante española y también comparten con ella una agradable escena en la ruta. Más allá de sus hermosas canciones, la película se apoya demasiado en la música y no aprovecha los silencios. Conclusión Los exiliados románticos es una película más, que no termina de enganchar y que se apoya excesivamente en la música de Miren Iza. Hay poco de romántico en el viaje de estos amigos, pero el film tiene un par de escenas destacables. Aún asi, en su conjunto deja mucho que desear.
Puertas Adentro (también conocida como Musarañas) es el primer largometraje de la dupla Juanfer Andrés-Esteban Roel, que cuenta con la producción de nada más ni nada menos que Alex de la Iglesia. Puertas Adentro La historia se sitúa en Madrid, durante la década del 50. Montse (Macarena Gómez) y su hermana menor, apodada “la niña” (Nadia de Santiago), viven juntas en un departamento. Su madre murió cuando nació su hija menor, y su padre las abandonó a los pocos años. Montse tiene una personalidad obsesiva que raya el desequilibrio, es fanática religiosa y sufre de agorafobia. Se las arregla trabajando como modista desde su hogar. La niña ya ha crecido, lo cual desespera a Montse, está perdiendo el control sobre su pequeña hermana. Una tarde, Montse encuentra en el pasillo a un hombre herido y que ha perdido el conocimiento (Hugo Silva). Lo entra a la casa para asistirlo, y su obsesión por este misterioso hombre no hace más que crecer. La niña, cansada de la actitud controladora de su hermana, trata de enfrentarla. La Sangre Brota Está muy bien manejado el suspenso, durante la primera mitad de la película el clima es de una calma tensa, de sentimientos contenidos a punto del desborde, para luego desarrollar durante la segunda mitad un festival de sangre espectacular. Lo que parece ser una simple historia de terror psicológico, da un giro hacia el gore. A la hora de derramar sangre, se nota la participación de Alex de la Iglesia en la película, y hay hasta cierta cuota de comedia en ciertas secuencias sangrientas. Las actuaciones están impecables, siendo Macarena Gómez quien más se luce por el papel que interpreta. Logra transmitir al espectador la angustia y asfixia que siente cuando se ven amenazadas sus obsesiones: el encierro y su credo. Es muy acertado el trabajo con los objetos: las herramientas de trabajo de Montse y los objetos religiosos ocupan un lugar central en la narración. Puertas Adentro tiene una gran potencia visual, con una puesta de cámaras que encierra y no da respiro. Conclusión Puertas Adentro marca el gran debut de la dupla española. Tiene una estructura sólida y efectiva, con más de un giro inesperado y una gran potencia visual. El elenco hace un gran trabajo, destacando la interpretación de su protagonista. El terror español suma un nuevo título para recomendar. Es una película que merece ser vista en la pantalla grande.
El gran secuestro de Mr. Heineken (Kidnapping Mr. Heineken), es la primera película hablada en inglés del sueco Daniel Alfredson (La Chica que Soñaba con un Fósforo y un Bidón de Gasolina, La Reina en el Palacio de las Corrientes), que narra el secuestro del magnate holandés de la cerveza, Alfred Heineken. Crónica de un secuestro Holanda, 1983. La recesión económica se hace sentir en la sociedad. Cinco jóvenes amigos, desesperados por su situación económica, llegan a la conclusión de que lo mejor que pueden hacer para ganar dinero es realizar un secuestro millonario. Por ese entonces, Alfred Heineken, magnate de la famosa cerveza (que además dejó sin trabajo al padre de uno de los muchachos), se convierte en el blanco perfecto. Ninguno tiene intenciones de hacerle daño a "Freddy" Heineken, la idea es secuestrarlo, cobrar el rescate y dejarlo en libertad. Deben hacerlo de manera profesional para no cometer errores ni levantar sospechas y así poder salirse con la suya. Puede fallar En El gran secuestro de Mr. Heineken el punto de vista reside en el grupo de amigos-secuestradores, que en un principio no tienen la más mínima experiencia en este tipo de delitos. El punto de vista termina limitando el vuelo de la historia, quedan cabos sueltos y hacia el final el relato pierde fuerza. Lo que no termina de funcionar del todo es la construcción de los personajes, no entendemos cuáles son sus motivaciones. No se termina de entender por qué no quieren tener, en palabras de ellos, "un trabajo normal" y ven como una mejor opción llevar a cabo un secuestro. Es interesante ver cómo se va complejizando la tarea de mantener a dos hombres secuestrados (Heineken es secuestrado junto a su chofer), y como se oscurece el panorama de los protagonistas. Las actuaciones son correctas, pero recomendamos que no pongan sus fichas en la interpretación de Anthony Hopkins, ya que se lo ve poco y solamente en situación de secuestrado. Visualmente es bastante prolija, las escenas de acción funcionan, pero da la sensación de que el guión se apoya demasiado en ellas. Conclusión El gran secuestro de Mr. Heineken entretiene, pero es una película que pasa sin pena ni gloria. No posee ningún rasgo que la haga sobresalir entre las películas de este género. Sus fallas residen principalmente en el guión, que construye de manera superficial a sus protagonistas, y una historia que se apoya demasiado en las secuencias de acción. Afortunadamente, no se extiende demasiado y logra mantener la tensión durante la primera mitad de la película.
Meryl Streep interpreta a Ricki Rendazzo, una mujer que en su juventud dejó a su marido y a sus tres hijos para perseguir su carrera en el mundo del rock junto a su banda en Ricki & The Flash: Entre la Fama y la Familia, escrita por Diablo Cody (guionista de Juno y Jóvenes Adultos) y dirigida por Jonathan Demme (El Silencio de los Inocentes, Filadelfia). Ricki and The Flash Ricki & the Flash: Entre la Fama y la FamiliaRicki Rendazzo (Meryl Streep) es la líder de Ricki & The Flash, una banda de rock que, a pesar de tener encima un par de décadas de trayectoria, nunca llegó a ser masiva. Se presentan en vivo de manera fija en un bar en California, y su repertorio musical alterna clásicos de rock de los 60 y 70 con canciones populares actuales, de artistas como Lady Gaga o Pink, para ganarse al público joven. Para ganarse la vida, Ricki trabaja como cajera en un supermercado. Pero al elegir el camino del rock, y sus fechas, giras y demás, Ricki dejó a su esposo y a sus tres hijos pequeños (y su nombre de casada) en Indianapolis, y no parece haberse ocupado demasiado de mantener el contacto con ellos a lo largo de los años. Un día, su ex esposo Pete (Kevin Kline) la llama para pedirle que viaje unos días a estar con su hija Julie (Mamie Gummer), que está muy deprimida por su reciente divorcio y que incluso tuvo un intento de suicidio. Ricki viaja para pasar unos días en la casa de su ex marido en Indianapolis (donde él vive con su nueva esposa) para acompañar a su hija, y de paso reencontrarse con sus hijos, que muchas ganas de verla no tienen. Mommy Issues Una película que tiene de director a Jonathan Demme, a Diablo Cody como guionista y a Meryl Streep como protagonista genera mucha expectativa (y ni hablar si tenemos en cuenta los ocho premios Oscar que suman ellos tres). Lamentablemente, el resultado no estuvo a la altura de lo que esperaba. Prácticamente no profundiza en la historia de Ricki, por qué dejó a su familia, cómo mantuvo la relación (o no). No ahonda en el conflicto familiar, ni en los matices que hacen a la personalidad de la rockera (incluyendo su postura política, se da a entender que es de derecha y anti-Obama, pero no mucho más). Lo mejor está en la música, interpretada por Ricki and the Flash, que acompaña el relato de principio a fin, y en el final de la película, que plantea un cierre mucho más entretenido que los minutos que lo anteceden. Por supuesto que Meryl Streep está más que bien, porque a ella le sale todo de taquito. Y que interprete a una cantante de rock es lo único que nos faltaba ver. Pero eso no alcanza para sostener una película, y se nota. El resto del elenco también hace un buen trabajo, y se destaca Mamie Gummer (hija de Meryl Streep en la vida real), sobre todo en los momentos de comedia de la película. Conclusión A pesar de tener a Meryl Streep interpretando a la líder de una banda de rock, Ricki & The Flash: Entre la Fama y la Familia es una película agradable, pero no mucho más que eso. Se muestra tibia ante el conflicto central de la familia, pero tampoco busca demasiado por el lado de la comedia. La música le sienta muy bien, pero en general la narración es bastante despareja, por momentos aburre, y por otros entretiene, y hacia el final repunta bastante.
Ciencias Naturales, de Matías Lucchesi, que forma parte de la Competencia Argentina del BAFICI [16], nos trae un drama familiar en medio de las sierras cordobesas. Coming of age on the rocks Lila (Paula Hertzog) va a una escuela rural y pupila en medio de las sierras cordobesas. Hace un par de intentos fallidos por escaparse. La directora la ve como una niña conflictiva, pero su maestra de ciencias naturales (interpretada por Paola Barrientos) ve un pedido de ayuda, un llamado de atención en ese comportamiento, no obstante, Lila se muestra reacia y antipática ante las intervenciones de su maestra. Lila nunca conoció a su padre, no sabe ni su nombre, pero quiere buscarlo. Su madre no quiere saber nada con esta idea. Sólo la maestra comprende la importancia del momento que vive su alumna, y hace todo lo que tiene a su alcance y aún más para ayudar a Lila. Ambas emprenderán un viaje y formarán un vínculo muy especial. Busco mi norte Matías Lucchesi nos trae una historia sencilla, en absoluto pretenciosa y brillantemente contada. Las actuaciones entregadas por Paula Hertzog y Paola Barrientos se ponen la historia al hombro. Con sólo ver la cara de Lila podemos comprender su fragilidad, su fuerza y sus ganas de crecer. Tiene un guión sólido y es interesante la vuelta de tuerca que hay en la historia, que hace que no sea una película más, ni caiga en los lugares comunes de este tipo de dramas familiares. La fotografía es impecable, y la puesta en escena también es sencilla. La inmensidad de las sierras, la desolación de la ruta y los pueblitos, todo esto musicalizado en su justa medida. El logro de Ciencias Naturales es que no hace falta nada más. Se puede contar una historia con muy pocos elementos. Conclusión Ciencias Naturales es un drama familiar contado con mucha sencillez y habilidad, con pocos elementos pero aprovechados al máximo. De la mano de grandes actuaciones y un guión sólido, Matías Lucchesi nos trae una historia triste pero llena de ternura, que no se deja caer en lugares comunes y sorprende.
Tres años después del lanzamiento de Ritmo Perfecto (Pitch Perfect) llega su secuela Más Notas Perfectas (Pitch Perfect 2), en la que Elizabeth Banks (co-protagonista en la primera entrega) hace su debut como directora en largometrajes. ¿Estará a la altura de la primera película? Tres años después Han pasado tres años desde que las Bellas de Barden ganaron la competencia nacional de canto a capella, y en ese tiempo se han consagrado tres veces como campeonas. Todo comienza con la presentación de las Bellas en un evento que cuenta con la presencia del presidente de los Estados Unidos. Por desgracia, un vergonzoso accidente de una de las muchachas arruina por completo la presentación. Este accidente es difundido por todos los medios de comunicación y es motivo de escándalo a nivel nacional. Las Bellas son la vergüenza del país y quedan descalificadas de la liga nacional. Su única chance de redimirse es ganar el Campeonato Internacional, contienda que nunca fue ganada por un grupo estadounidense y que tiene entre sus competidores al temible y talentosísimo grupo alemán Das Sound Machine. Las Bellas, ahora lideradas por Chloe (Brittany Snow) y Beca (Anna Kendrick) deberán innovar y volver a superarse a sí mismas para tener una mínima chance de ganar la competencia. Pero no todo es canto a capella en la vida, las jóvenes están a punto de graduarse de la universidad y deben decidir cómo seguir con sus carreras. Más notas perfectas La estructura es muy similar a la de Ritmo Perfecto (¿la Bring it on de esta década? Yo creo que sí). La película comienza con una presentación de las Bellas que termina en desastre, lo cual genera una crisis en el grupo que deben superar y tienen un rival talentoso y amado por el público, y para ganarle, deben innovar con su propuesta. En cuanto a resultados, algunos elementos se mantienen igual que en la primera entrega. Tanto la gorda Amy como la dupla John Michael Higgins - Elizabeth Banks son responsables de los mejores momentos de comedia de la película. Igualmente, Anna Kendrick y el resto de las Bellas también hacen lo suyo. Además, se mantiene el tono de comedia de la 1, es solemne como ciertos musicales y cuando parece que una escena se vuelve muy melosa, un pase de comedia la saca de ese lugar. La película encuentra sus mejores momentos musicales en la batalla de improvisación (no podía faltar este tipo de competencia en la película) y en el final, en el que las Bellas terminan sorprendiéndonos. Esta segunda entrega mantiene ese amor por la música pop que se nota en la primera. Conclusión Más notas perfectas no está a la altura de su antecesora, la genial Ritmo Perfecto, pero aún así cumple con lo que promete. Música, baile, canciones pop y competencia, todo en tono de comedia. No deja de ser una película disfrutable y entretenida para quienes apreciamos la primera película. Si no les gustó Ritmo Perfecto, no se acerquen a esta secuela porque no les ofrece nada que les pueda interesar.
Dólares de Arena, basada en la novela de Jean-Noel Pancrazi y dirigida por Laura Amelia Guzmán e Israel Cárdenas (Cocochi, Jean Gentil) pone su foco en la relación entre una señora mayor de origen francés radicada en las playas de República Dominicana y una joven local. Quiero dinero Dólares de arena se centra en la historia de Anne (Geraldine Chaplin), una señora mayor de origen francés que vive en un hotel de Las Terrenas, una localidad balnearia de República Dominicana. Anne tiene familia en su Francia natal, pero por motivos que desconocemos, se ha refugiado en las amplias playas de República Dominicana. A su vez, lleva tres años de relación con Noelí (Yanet Mojica), una joven dominicana a quien le paga por su compañía. Estas mujeres mantienen una relación cercana, de un grado alto de intimidad. Por otro lado, Noelí tiene un novio (Ricardo Ariel Toribio) que demanda su cariño. Por su parte, Anne ha ido desarrollando sentimientos por Noelí, y desea llevársela con ella a Francia para ofrecerle otra vida. A todo esto, la joven dama de compañía aprovecha esta situación para sacar ventaja de la relación. No culpes a la playa A pesar de su corta duración (80 minutos), llega un momento en que el relato se estanca y se vuelve repetitivo. Más allá de eso, la historia va más allá de un romance entre dos mujeres con una gran diferencia de edad o de un caso de turismo sexual, como ya se ha visto en Paraíso: Amor, de Ulrich Seidl. Lo valioso aquí tiene su lugar en lo ambiguo de la relación, imposible de encasillar y donde no se sabe quién tiene el poder, y en la tensión que aporta el triángulo amoroso formado entre Anne, Noelí y su novio. No sabemos hasta qué punto Noelí tiene como cliente a Anne, o si efectivamente hay cariño por parte de la joven. A su vez, es llamativo el contraste de edad y origen social de las mujeres. Allí mismo reside la belleza de esta película, en el modo de relacionarse que encuentran estos dos cuerpos y su enorme contraste. Las piernas acariciándose y balancéandose representan uno de los planos más pregnantes de Dólares de Arena. Conclusión Dólares de arena cuenta entre sus aspectos destacables el gran trabajo de Geraldine Chaplin y de Yanet Mojica. Lamentablemente, llega un punto en que el relato pierde fuerza y no termina de sostenerse la tensión a lo largo de la película. Más allá de eso, es necesario destacar la originalidad del tema elegido como punto de partida de la película y su tratamiento.
Placer y Martirio es la séptima película de José Celestino Campusano (Vil Romance, El Perro Molina), que conformó la Competencia Argentina del BAFICI [17]. Obsesión Delfina (Natacha Mendez) es una adinerada mujer que cuenta con un estudio de diseño propio y vive con su esposo y su hija adolescente. Su amiga Jimena le presenta a Kamil (Rodolfo Ávalos), un hombre de negocios y la atracción es inmediata. Delfina nunca ha sido infiel, pero está aburrida y se obsesiona con este misterioso hombre. Desde un comienzo Kamil pone las pautas de la relación: se verán sólo cuando él pueda, Delfina no debe indagar en ningún aspecto de la vida de él y demás requisitos (incluso sexuales). Delfina compromete progresivamente todos los aspectos de su vida en función de estar disponible para encontrarse con Kamil. Placer y Martirio Esta vez, a diferencia de sus películas anteriores, la historia está centrada en las vivencias de personas de clase alta porteña. Se ve un trabajo muy interesante con el tema de las máscaras y la sangre. Lo que puede ser visto como una mala actuación por parte de Natacha Mendez es en realidad el hecho de que su personaje, Delfina, es la que actúa frente a los otros y no se deja ver como realmente es. Es más, todos los personajes juegan a las apariencias, nadie baja su guardia. Las escenas del tratamiento médico de Delfina son de una gran crudeza, pero no son sórdidas. Vemos cómo se obsesiona con Kamil al punto de descuidar todo lo que tiene, incluso los diálogos entre los amantes tienen momentos realmente cómicos. Es hermosa la escena que comparten los personajes de Delfina, su mucama, Mirta y Jimena, donde nuestra sufrida protagonista se da cuenta de todos los sacrificios que hace por su amante. Ante todo, se nota un gran cariño del director por sus personajes, no los juzga en ningún momento. Conclusión Una vez más, Campusano nos entrega una película realista y libre. En sus 100 minutos de duración, Placer y Martirio no decae en ningún momento y narra con gran ritmo una historia de obsesión y sufrimiento.
Tras su paso por la Competencia Internacional del BAFICI [16], llega a los cines de Buenos Aires Un castillo en Italia (Un château en Italie), tercera película de la actriz y directora italiana Valeria Bruni Tedeschi. ¿Quién me quiere a mí? Louise Rossi Levi (Valeria Bruni Tedeschi) tiene 44 años y pertenece a una familia de mucho dinero, dueña de un castillo en Italia. Su hermano Ludovic es enfermo de sida y su madre parece ser la única con sentido común en la familia. Louise fue actriz en su juventud y transita una crisis existencial, que la hace vivir en un estado casi histérico. La familia construyó su riqueza gracias a las fábricas del padre, y tanto Louise como Ludovic poco tienen que ver con ese rubro y aparentemente nunca se interesaron mucho por trabajar. Las deudas agobian a los Rossi Levi, y se les aconseja que pueden saldarlas vendiendo el castillo y sus suntuosos bienes. Mientras tanto, Louise conoce a Nathan (Louis Garrel), un actor veinte años menor que ella, obsesionado con su pasado como actriz. De a poco, entre el temor y la ansiedad, empiezan una relación amorosa a la vez que Louise trata de hacerle frente al mal momento económico y familiar. El discreto encanto de la burguesía La historia tiene mucho de autobiográfica. Valeria Bruni Tedeschi es actriz, conocida por Munich y 5×2, y proviene de una familia culta y rica (y es la hermana mayor de Carla Bruni). Mantuvo una relación con Louis Garrel, actor 19 años menor que ella e hijo del director Philippe Garrel (en la película Nathan está rodando una película dirigida por su padre). Quizá sea el apego a la historia lo que le juega en contra a la película. El guión y la construcción de los personajes están flojos. Un castillo en Italia gira en torno a Louise y su despliegue de histeria, quizá el único personaje que no consigue generar empatía en el espectador. Corre, grita, salta, llora, no hay medias tintas, todas sus reacciones son exacerbadas y molesta mucho. Ludovic es un mártir, siempre solemne. El personaje de la madre salva la película, la única de la familia con los pies en la tierra y con matices interesantes. Además, no se entiende bien el tono del film, supuestamente es una comedia dramática (o amarga), pero nada resulta lo más mínimamente gracioso. En los momentos de mayor tristeza se pone cursi, en el velorio hay un monólogo lastimoso del amigo borracho de la familia, y el final está muy edulcorado. Para rescatar, hay algunos guiños simpáticos, como la canción de Rita Pavone que cantan los hermanos cuando pasan por la fábrica del padre y el videoclip de dicha canción en los créditos de la película; y la breve escena de coqueteo entre la madre de Louise y el mismísimo Omar Sharif. Conclusión Un castillo en Italia desilusiona, no encuentra el tono adecuado para contar una historia de crisis de todo tipo (existenciales, económicas y familiares) y su protagonista-guionista-directora compone un personaje muy insufrible, lo cual logra que nos interese muy poco lo que le sucede. De todas maneras, es llevadera y tiene algunos elementos rescatables.