El padre
Lo de Jaume Collet-Serra y Liam Neeson a esta altura ya es una dupla creativa. No sé cuánto colaborará Neeson en las decisiones durante la pre-producción o el rodaje pero lo que está más que claro en Una Noche Para Sobrevivir (Run All Night) es que todo el diseño de la puesta en escena gira alrededor de su figura. Todos los planos están elegidos para afianzar aún más su figura de nuevo héroe de acción patriarcal. Collet-Serra se tomó este trabajo en serio, sólo alcanza mirar la evolución de Neeson mismo como personaje en la trilogía formada por Desconocido (Unknown, 2011), Non-Stop: Sin Escalas (Non-Stop, 2014) y esta. En este caso también lo ayuda el guión de Brad Ingelsby que ya había usado el arquetipo en La Ley del más Fuerte (Out of the Furnace) con un hermano mayor que era sin dudas un padre.
En este punto es preciso que diferencie a Una Noche para Sobrevivir de la saga Taken. La del 2008 funciona como una historia con moraleja contada en un mapa geopolítico sin grises. En ese contexto su Bryan Mills carga con todas las angustias que tiene el americano protestante medio (Neo WASP) que aún ve a Europa como una amenaza a sus valores. ¿Es Búsqueda Implacable (Taken, 2008) una buena película de acción? Por supuesto. Una Noche Para Sobrevivir lleva Europa a Estados Unidos y presenta a un clan mafioso que mezcla costumbres Irlandesas con otras Rusas en una lógica moral propia basada en códigos criminales. Hay dos padres que representan las caras de una misma vida. Uno alcanzó el “éxito” y el otro no. Esa palabra está tomada con una profundidad que va más allá de los logros económicos. Cada uno tiene un hijo que no pretende seguir los mismos pasos que su padre. Este mecanismo tampoco es igual para ambos, digamos que uno es más parecido a Santino Corleone y el otro al Michael Corleone de la boda de Connie. Esta relación especular entre ambos padres e hijos es el verdadero motor del relato.
Jaume Collet-Serra explota al máximo la figura de Liam Neeson alejándolo del reduccionismo de Búsqueda Implacable.
Una vez entendido lo dicho arriba, el film propone el recorrido del héroe no para enfrentarse a un villano, sino a una parte de su propia vida (relacionada especularmente) y volverse a vincular con el camino abandonado. Al mismo tiempo, le propone un viaje al hijo por el camino de su padre para que revivan sus decisiones y pueda así cerrar el círculo.
La triada actoral madura conformada por Liam Neeson, Ed Harris y Vincent “Kingpin” D’Onofrio le da una atmosfera densa al clima general del film ya que los tres están en la etapa profesional en la cual tienen la capacidad de reducir sus gestos a la mínima expresión y aún así lograr que sus sentimientos traspasen la pantalla. Una Noche Para Sobrevivir es una película de acción de un clasicismo hermoso, que pone todo (ritmo, cámaras, efectos en CGI, música) a disposición de contar una historia.