Es la adaptación del famoso videojuego que permite abrir la puerta de una saga, o al menos los tres guionistas (Rafe Lee Judkins, Art Marcum y Matt Holloway) se muestran muy seguros para explicitarlo al final. La idea de buscar un tesoro, con protagonistas que enlazan sus conocimientos de historia y no se detienen ante nada siempre es atractiva, aquí se trata del tesoro que se supone Magallanes y su equipo guardaron tan bien que se lo perdieron. Para encontrarlo hay que tener a Victor “Sully “ Sullivan ( Mark Wahlberg) y su compañero Nathan Drake ( Tom Holland) que ponen todo su empeño. Cuenta la leyenda que el bueno de Wahlberg iba a ser el protagonista, pero tardaron tanto en darle luz verde al proyecto que el paso de los años lo obligó a conformarse con ser el “histórico” buscador y la posta quedo en manos de Holland, que se entrenó duramente para todas las acrobacias que hace en la peli. La idea fue brindar momentos de mucha acción, como que guionistas y director Ruben Flescher (“Venon” y “Zombieland”) dieron por sentado que a nadie le interesa profundizar en los personajes y todo lo que pedirá la audiencia es despliegue de robos, persecuciones, luchas y por sobre todo descubrir claves para todo el oro imaginable. Por eso no existen diálogos ingeniosos ni se profundiza en los personajes. Hay que reconocer que muchas escenas son realmente atractivas como la que da comienzo a la película y luego repiten y amplían y algunas corridas con la técnica del parkour. Las villanas verdaderas son las chicas que para acción son mandadas a hacer, se lucen: Chloe Trazer y Tati Gabrielle. Un entretenimiento vistoso, que dura lo justo y que seguramente será un éxito.