La interesante y trágica vida del pintor holandés tuvo más de cinco biopics siendo el ultimo Loving Vincent, con formato de cine de animación en el que todas sus secuencias estaban pintadas por un grupo de artistas imitando la técnica y los colores que utilizaba Van Gogh.
En este nuevo film Van Gogh en la puerta de la eternidad, el pintor y cineasta Julian Schnabel nos sumerge en la vida de Vincent van Gogh durante su exilio auto impuesto en Francia, específicamente en Arlés y Auvers-sur-Oise, los últimos meses de su vida, enfermo, pobre y encerrado en un asilo mental.
Schnabel elige momentos clave en la vida del pintor, conversaciones con su hermano Teo y la cámara en mano que se transforma en un compañero de viaje que presenta los estados de excitación o de profunda depresión del pintor, su nula capacidad de congeniar con las personas a su alrededor, y el terrible dolor que le significa perder a Paul Gauguin, una de las pocas personas que pudo comprenderlo.
La minuciosidad técnica y el interés del director por los detalles sumado a la cámara en mano nos hace mirar con los ojos de Van Gogh, para intentar entender que el artista No pintaba el objeto o la persona que tenía delante sino la experiencia que vivía con ellos, el momento que compartían, el recuerdo que le quedaría.
Willem Dafoe hace una memorable interpretación, que la valió una merecida nominación al Oscar, del pintor, dotando de profundidad, matices y naturalidad a su personaje y sumergiendo al espectador en la mente atormentada de este artista castigado por la incomprensión del mundo, su creatividad excepcional, su inconsolable sensación de fracaso al no conseguir vender ni uno solo de sus cuadros, sus estancias en manicomios, su exaltación ante los paisajes y su consecuente suicidio.
El simple sonido de la naturaleza y sonidos muy cercanos al silencio, combinados con destacados diálogos que logran cuestionar temas tan ambiguos como la existencia de Dios, el arte y la muerte, son algunos de los méritos de este film que reflexiona sobre el arte, sobre la creación y su innegable aspiración de dejar un legado. Pero cuyo mayor logro es conocer mas sobre el brillante y tortuoso Van Gogh y devolver a este icono de la pintura y el arte el valor de genio que merece.