Venganza

Crítica de Catalina Dlugi - El portal de Catalina

Para su desembarco en Hollywood el inteligente director noruego Hans Petter Moland ha decidido versionar su propio film. Protagonizada por Liam Neeson en lugar de Stellan Skarsgärd y con un guión adaptado junto a Frank Baldwin del original escrito por Kim Fupz Aakeson. Se aseguró de esta manera que no le arruinaran la versión y que no perdiera nada de su humor negrísimo y por lo tanto divertido. Evitando que el film fuera uno de acción y “ojo por ojo” que el mismo Neeson hizo muchas veces. Es más, en entrevistas para promocionar el film, el actor, hizo horribles y olvidables declaraciones.  Pero se trata solo de pasarla bien con este divertimento sangriento, con reminiscencias de Tarantino y los hermanos Cohen. Una excusa para todo: Lian Neeson es el encargado de abrir caminos en la nieve en su pequeño pueblo de Colorado. Hasta lo nombran ciudadano ilustre. Pero cuando matan a su hijo, y lo que quieren engañarlo por la causa de muerte,  descubre que lo asesinaron. Y a partir de ese descubrimiento, tomará venganza por mano propia. El problema es que es un crimen mafioso con muchos responsables, aliados estratégicos y al padre acongojado se le empiezan acumular los cadáveres .Y cada vez que esto sucede, un aviso mortuorio en forma de lápida se usa como insólito separador.  Nada se parece a las películas de acción tradicionales. Es un entretenimiento perfectamente diseñado para la diversión redonda, truculenta, donde se van acabando los malos en riguroso orden. Hasta un final de enfrentamiento de bandas que acomoda los tantos para el sarcasmo, la risa y nada de piedad para un grupo de matones de todos los colores. Un juego macabro, acción que  nunca deja de entretener con inteligencia.