No es la primera vez que Judi Dench hace de la Reina Victoria (o de reina ingesa, para el caso), así que conoce al personaje. Frears, que es un realizador inteligente, cuenta esta historia de la amistad de la soberana con un joven indio al que transformó en secretario privado con humor, ingenio y dejando que el espectador comprenda a través de lo no dicho lo que sucede entre estos dos caracteres. Una sutileza con sonrisa británica.