Los cazadores de riquezas
Documental sobre la mina de Esquel, Chubut.
Vienen por el oro, vienen por todo” es el texto que escribe un manifestante contra la explotación de una mina de oro en Esquel al comienzo de este documental que se centra, principalmente, en los esfuerzos de los habitantes de esa ciudad por impedir que una multinacional canadiense explote los recursos minerales de la zona con las graves consecuencias ecológicas y ambientales que eso conllevaría.
Un poco a la manera del documental de Pino Solanas, Tierra sublevada: oro impuro , lo que se intenta contar aquí es cómo los recursos son saqueados por compañías que directamente se llevan todo el dinero y las riquezas minerales que el país es capaz de producir, dejando a su paso pobreza, contaminación en el agua y el aire, y las consecuentes enfermedades que eso produce.
Pero el filme no intenta jamás escuchar a las dos partes ni analizar en profundidad la situación. Toma claramente partido desde el principio y relata la epopeya de los que se opusieron a la mina y lograron, en un plebiscito de 2003, que no se permita su instalación. Hay poco, muy poco, del otro lado de la batalla dialéctica para que el espectador pueda analizar seriamente los hechos y entender mejor la complejidad del tema. El filme es más un repaso de una gesta heroica que un análisis concienzudo de un complejo problema político, económico y social.
Lo que complica la situación en Esquel es la falta de trabajo y eso es lo que lleva a muchos habitantes a pensar que trabajar en la mina es mejor que morirse de hambre o seguir desempleados por años y años. Para eso no parece haber solución (tampoco es el rol del filme obtenerla) y, de hecho, tampoco para la presión de las empresas, que pese a los varios rechazos, continúan al día de hoy intentando explotar esos preciosos recursos nacionales.