LAS VUELTAS DE LA CUESTION ZOMBI
Un cataclismo mundial contado desde el punto de vista sesgado de unos pocos protagonistas, eso es Viral, y también es el mecanismo de un amplio porcentaje de películas de zombis, y de epidemias fatales en general, desde que George A. Romero estableciera el estándar allá por 1968. Viral es, además, una película de la productora de Jason Blum, Blumhouse, que tiene la particularidad de utilizar un modelo de producción independiente pero que se distribuye a través del sistema de estudios convencional. Son películas de muy bajo presupuesto que sostienen cierta calidad dando como resultado una amplia rentabilidad y, a veces, resultados artísticos superlativos. Esa obra maestra llamada Whiplash (Damien Chazelle, 2014) pertenece a la factoría de Blum.
Lo moderadamente interesante de esta película dirigida por Henry Joost y Ariel Schulman es que, a pesar de ser increíblemente convencional y lineal, no falla en las áreas donde suelen fallar las películas de bajo presupuesto, incluso algunas de Blumhouse. Por ejemplo, las actuaciones son solidas y creíbles, las hermanas Drakeford interpretadas por el tándem Sofía Black-D’Elia y Analeigh Tipton sostienen el drama con mucha solvencia, además la sub-trama romántica está contada con sensibilidad e, increíblemente, agrega sentido a la historia, algo que en el cine de género barato no sucedía desde los ochenta por lo menos. Los directores demuestran tener pericia para la puesta en escena y unas cuantas ideas para el fluir de la narración, hay un par de secuencias inquietantes en una escuela que están bien resueltas. De hecho los primeros 40 minutos de Viral avanzan sin mayores lagunas narrativas.
Los problemas los encontramos promediando el final, lo predecible del guión y lo flaco del relato hacen que la película gire un poco en círculos hasta que, de alguna manera, encuentra cómo encauzar los conflictos en una buena resolución final. Además la amable corta duración del film no nos deja caer en la tentación de aburrirnos por lo cual Viral parece salvarse.
No deja de ser curioso cómo la enésima apuesta a un film de bajo presupuesto de encierro sobre el tema de zombis o infectados (combinación que en general da resultados olvidables) como Viral puede ser aceptable y hasta un poco más, cuando detrás se tiene un par de ideas y algo de pericia a la hora de dirigir. Es curioso porque son incontables los ejemplos de malas películas hechas con los mismos puntos de partida.