Tras algunos años de inactividad, Steve McQueen (“12 Years a Slave”, “Shame”) vuelve al cine con un poderoso thriller que combina las especificidades del género y sus características más duras con un fuerte trasfondo sociopolítico que denuncia el machismo, la corrupción y la criminalidad que rodean a la sociedad moderna.
“Viudas” representa la adaptación cinematográfica de la miniserie británica homónima de 1983, cuya acción, en esta ocasión, se sitúa en Chicago y nos relata los acontecimientos que rodean a un grupo de mujeres que no tienen nada en común más que el hecho de haber sido las esposas de cuatro difuntos criminales que perecieron en mitad de un atraco. Verónica (Viola Davis), Alice (Elizabeth Debicki), Linda (Michelle Rodriguez) y Belle (Cynthia Erivo), quien, a pesar de no ser una de las viudas, se involucra posteriormente por necesidad de ambas partes, deciden tomar las riendas de su destino y conspiran para forjarse un futuro con sus propias reglas. Verónica encuentra la libreta de Harry, su cónyuge (Liam Neeson), y con eso decide confabularse con el resto de las viudas para terminar el próximo golpe que tenía planeado el líder de los delincuentes, y de esta forma poder saldar una deuda heredada por las actividades criminales del grupo comando. Ahí entrará en juego el ámbito político, cuando Jamal Manning (Brian Tyree Henry), un afroamericano con un presente mafioso que está postulándose como concejal para regir el distrito de Chicago donde realizan sus negocios turbulentos y su hitman, el hermano del candidato, Jatemme (Daniel Kaluuya), comiencen a amenazar a Verónica para que termine de saldar la deuda de su esposo. Por otro lado tenemos a los Mulligan, una familia igual de corrupta que sus rivales, que tiene controlado al distrito hace generaciones (un clan que recuerda un poco a los Rodríguez Saa y su historia en San Luis) y cuyo último representante fue el anciano Tom (Robert Duvall) que ahora deja atrás su participación para endorsar y acompañar a su hijo Jack (Colin Farrell), quien también está vinculado con los sobornos en los cargos públicos y demás actividades ilícitas.
La historia comenzará a desarrollarse de manera vertiginosa con el asalto donde fallecen los delincuentes y luego, paso a paso, se empezará a gestar la trama principal donde vemos cómo estas mujeres dejan atrás sus zonas de confort para intentar reconstruir sus vidas. A mitad de camino entre el thriller policial duro y las heist movies, McQueen se tomará su tiempo para hacer las denuncias pertinentes en cuanto a los hechos de corrupción y los teje-maneje del ámbito político, al igual que una crítica feminista que evita todos los lugares comunes y simplistas para elaborar un relato duro, plagado de violencia y de crudeza, donde las viudas se enfrentan a paradójicos escenarios donde deben descuidar a sus hijos y trabajar como niñeras para subsistir y conseguir dinero o incluso convertirse en escorts para el mismo fin. Todo esto es posible gracias a un inspirado trabajo del elenco donde se destacan Viola Davis, Elizabeth Debicki y Michelle Rodirguez, y Colin Farrell y Daniel Kaluuya en el sector de los actores de reparto.
El guion también es otro de los puntos altos del largometraje y fue coescrito por Gillian Flynn, autora de las novelas “Gone Girl” y “Sharp Objects”, las cuales también fueron adaptadas al ámbito audiovisual, y el mismo McQueen. Si bien por momentos hay algunas cuestiones que pueden resultar un poco inverosímiles o tiradas de los pelos, en líneas generales no terminan de opacar el impecable trabajo que se hizo en dirección, en interpretaciones y en todo lo que respecta a la puesta en escena.
“Viudas” representa una idea interesante y entretenida que combina el cine de género puro con la denuncia más reflexiva hacia ciertos tópicos actuales en el ámbito sociopolítico y cultural. Un film con grandes aciertos que se perfila para conseguir algunas nominaciones en la próxima temporada de premios.