Casi quince años después de “Yo no sé qué me han hecho tus ojos”, uno de sus directores reencuentra el material fílmico perdido de su primer encuentro con Ada Falcón. Una “escena muda” dispara su búsqueda por descifrar el enigma de la voz ausente, en un viaje emocional en el que el cine se convierte en un camino para desandar el tiempo.