En el año 2009 conocimos gracias al BAFICI a Kelly Reichardt (Old Joy). Si bien no pude ver los demás films de la realizadora independiente más respetada de hoy en día, se puede apreciar al menos en este una cinefilia que se remonta 40 años atrás y que es tan estadounidese como el western (dicho sea de paso, la ultima película de Reichardt, Meek's Cutoff, es un western que se presentó con muy buenas críticas en Cannes).
Wendy (excelente Michelle Williams) se escapa y decide vagar por el oeste de EEUU hasta llegar a Alaska (como el protagonista de Hacia Rutas Salvajes) junto a su perra Lucy.
Sin embargo, cuando una noche Lucy se pierde, la busqueda de Wendy por su perra, se convierte en prioridad. Sin dinero, en un pueblo extraño, Wendy trata de sobrevivir y sobre llevar su perdida.
Road movier o drama austero, bien independiente, con estilo melancolico que hace recordar cierto espíritu setentista o Harry y Tonto de Paul Marszusky, este tercer largo de Reichart la confirman como una gran realizadora. Por momentos puede ser que el relato divague, y algunas escenas merecen mayor desarrollo. Sin embargo, la emotividad contenida, nunca gratuita y el realismo, acompañado por excelentes planos secuencias le dan una profundidad impensable a primera instancia, gran calidad cinematografica y poder sensorial. Además conforma una sutil pero consentida crítica hacia la mentalidad conservadora de los pueblos rurales del norte de Estados Unidos. Cabe destacar la notable fotografía de la propa directora, además del excelente trabajo de Lucy como ella misma.
La película se exhibe únicamente en el cine Cosmos-UBA.