Luego del evento que involucró al ex Presidente Nixon, todos los mutantes encontraron su lugar en el mundo. Charles lleva adelante su Instituto, Erik se cambió el nombre y formó una familia exiliado en Polonia y Raven viaja por el mundo liberando a mutantes mientras es una heroína para todos. Pero todo cambia cuando una fuerza milenaria es despertada; ahora las viejas alianzas deben reafirmarse, y nuevos mutantes tienen que asumir el riesgo de detener al Primer Mutante, Apocalipsis.
A esta altura parece redundante repetir lo mismo a cada film de X Men que sale, pero bueno… Antes de hacer el análisis recuerden que Bryan Singer se toma de forma bastante libre los cómics, ya sea a la hora de adaptar personajes, trajes o arcos argumentales; o que el sentido de realidad contínua entre sus películas parece no existir. Aclarado esto, empecemos.
La opinión general previa a esta X Men: Apocalipsis era bastante tibia. A la mayoría nos daba bastante temor lo que podía resultar de esta nueva entrega, ya que la mitad del elenco se renovó, introduciendo nuevos actores en personajes que ya conocemos, y el plus de traer a la gran pantalla al villano más esperado y pedido de los mutantes.
Aquellos que esperan ver un Apocalipsis como el visto en la serie animada de los 90, les digo que a menos que quieran odiar esta cinta, vayan sacándose esa imagen de la cabeza. Este Apocalipsis poco tiene que ver con el que está en el imaginario popular, teniendo un pastiche de poderes pocos claros, o peor aún, que se van revelando cuando el guión los necesita.
Pese a todos estos factores en contra, hay que admitir que X Men: Apocalipsis es bastante entretenida, y mejor de lo que se venía rumoreando en las críticas provenientes de Estados Unidos. No estamos ante la sorpresa del año, pero cumple con su objetivo de divertir.
Por un lado el protagonismo está bastante repartido a nivel grupal, cosa que aporta bastante dinamismo a la historia, que pese a extenderse dos horas y media, casi en ningún momento se hace larga o densa. La acción también esta dosificada; y al igual que en X Men: Días del Futuro Pasado donde no había una escena de acción memorable, tampoco se echaba en falta porque todo lo que se cuenta tiene un motivo de ser (aunque sí hay un par de escenas que se sienten un fanservice puro y duro, en especial a lo referente a determinado personaje).
También juega a favor que al igual que en Capitán América: Civil War, el conflicto ya sea a nivel mundial, dándole bastante más importancia al villano y qué pasaría si cumple su plan (que en este caso no queda del todo claro).
Es una pena que de las nuevas adquisiciones para el grupo, no todos salgan bien parados. Sophie Turner es quien más sorprende como la joven Jean Grey, mientras que Tye Sheridan y su Cíclope vuelven a mostrar que debe ser el personaje menos querido por Bryan Singer. En el medio queda Olivia Munn y una Psylocke que pedía mucho más protagonismo, y varios mutantes que seguramente no pasarán de este film.
X Men: Apocalipsis aprueba con la misión de entretener, pero hasta ahí llegan sus méritos. Lamentablemente desaprovecha mucho a un villano con un potencial enorme, y vuelve a cometer errores que ya parecen ser el sello característico de Bryan Singer, en lugar de aprender de viejos errores. Eso sí, al menos se toman su tiempo para pegarle un hermoso golpe bajo a la tercera entrega, que hasta los mismos responsables de la saga reconocen como la peor.