"Una nueva esperanza"
Luego de varias idas y vueltas finalmente el padre del cine moderno de superhéroes volvió a la pantalla grande con una de las mejores producciones del género que él mismo redefinió hace unos años.
Bryan Singer es sin dudas el realizador más importante de las últimas décadas en lo que se refiere al cine basado en héroes nacidos en cómics. Sus excelentes “X-Men” (2000), “X-Men 2” (2003) y “Superman Regresa” (2006) así lo confirman, aunque con la llegada de directores de la talla de Christopher Nolan (responsable de la última saga de Batman) y Zack Snyder (director de “Watchmen” y “Man of Steel”) el público parece haberse olvidado un poco el orden de las cosas.
Hay que dejar en claro que sin los primeros dos trabajos de Singer dentro del universo de los mutantes de Marvel difícilmente hubiéramos podido disfrutar de esta etapa dorada que viven hoy los superhéroes en la pantalla grande.
Con el regreso de Singer al sobrecargado campo de batalla de franquicias basadas en cómics, Marvel encontró al oponente más poderoso a vencer de acá a un par de años y lo paradójico es que se trata de un rival que lleva el sello de su propia casa (recordemos que Fox tiene los derechos de estos personajes junto con los de “Los 4 Fantásticos”).
La exitosa y a su vez pisoteada y desorganizada saga de los X-Men vuelve a consolidarse a partir de “Días del futuro pasado” como una de las más importantes del cine de acción y ciencia ficción de los últimos años y eso se debe, principalmente, al espectacular trabajo que realizaron en esta nueva oportunidad Singer, el guionista Simon Kinberg y el productor Matthew Vaughn.
El principal acierto de esta séptima producción que tiene como protagonistas a los X-Men es que vuelve a las bases argumentales que tan bien funcionaron en las películas del 2000, 2003 y, en menor medida, también en la del 2006. Es decir, nuevamente los responsables del film lograron combinar de forma perfecta grandes dosis de suspenso y drama con increíbles escenas de acción.
Si bien en “X-Men: Primera generación” (2011) Vaughn había logrado algo similar, con el arribo de esta nueva producción de Singer queda claro que el arco argumental dramático, humano y serio de estos personajes todavía puede expandirse muchísimo más. Y ese pulso, hasta ahora intacto, parece tenerlo únicamente Singer.
“Días del futuro pasado” es por lejos la más imponente, compleja y profunda de toda la saga. Eso no es poca cosa.
Junto con “Watchmen” de Snyder, “X-Men: días del futuro pasado” se consolida como una de las películas, basadas en cómics, más adultas y espectaculares de los últimos años. Y repito; es por lejos, la pieza más valiosa y brillante de una saga que lleva 14 años vigente en la pantalla grande.
No sería justo olvidarse de los grandes trabajos que ofrecen los viejos actores de jerarquía que forman parte de esta saga, donde sobresalen Hugh Jackman y Patrick Stewart. Tampoco podemos dejar pasar lo fundamental que son los cada vez más asentados actores James McAvoy, Michael Fassbender, Nicholas Hoult y Jennifer Lawrence dentro de este consolidado nuevo comienzo de los “X-Men” que comenzó en el 2011.
Párrafo aparte para la gran labor de Peter Dinklage como Bolivar Trask y el joven Evan Peters como Quicksilver. El primero no solo compone un poderoso y paranoico villano de escritorio para demostrar que el poder de la inteligencia es completamente superior al de la fuerza, sino que también demuestra de una vez por todas que esta clase de enemigos funcionan de maravilla dentro de este tipo de films. Por su parte, el segundo, se roba la película por completo con su aparición ofreciendo una escena de antología que quedará por mucho tiempo en el recuerdo de los fanáticos, junto con el increíble arranque de “X-Men 2”.
Resulta imposible, como amante de estos personajes y de esta clase de películas, no emocionarse ante el glorioso regreso de los mutantes más famosos del mundo del entretenimiento. Y por ese mismo motivo, no existen excusas para dejar pasar la oportunidad de ver el mayor esplendor de la patrulla X en la pantalla grande.
Volvió Singer. La casa está en orden.