xXx: Reactivado es un descarado engendro de marketing. No hay talentos aquí explorando una idea interesante sino una mezcla de ingredientes pensada para que de rédito en la taquilla sin importar lo horrible que sea la historia. Escenas de muchísima acción (tan increíble como ridícula), protagonistas que desbordan carisma para compensar un libreto hueco, estrellas internacionales para asegurar la taquilla en mercados extranjeros (chinos, indios, tailandeses, etc), y un vano intento de reciclar una franquicia espantosa en una especie de Rápido y Furioso de segunda mano. Y si bien Rápido y Furioso comenzó como XXX - aventuras huecas pasadas de adrenalina -, en un momento encontró una fórmula alternativa y comenzó a funcionar de manera deliciosa, encontrando un balance entre disparate y una trama interesante. Pero acá todo es tan burdo, tan a lo macho (incluyendo a la villana de turno) que el filme sólo resulta digerible cuando los protagonistas están destruyendo cosas. Cuando se calman y deben vomitar pedazos de exposición para avanzar la trama, ahí es cuando se nota que el libreto de xXx: Reactivado fue escrito por una pandilla de simios aporreando máquinas de escribir.
Si la primera XXX fue un vano intento de hacer un James Bond para la generación MTV, la realidad es que - 15 años y tres películas después - la fórmula sigue sin cuajar como corresponde. Es ridículo ver a Vin Diesel todo tatuado y semidesnudo haciéndose pasar por agente secreto - es como cuando los mexicanos ponían a Santo, el Enmascarado de Plata como espía; ¿en serio piensan que un tipo tan farolero y disfrazado puede pasar desapercibido en algún lado? -. Al menos el libreto tiene el tino de convertirlo mas en mercenario que en 007 excedido de tatuajes, con lo cual se mezcla con otros individuos tan estrafalarios como él. Al gobierno se le perdió la Caja de Pandora - un dispositivo para hackear y controlar cualquiera de los 30.000 satélites que orbitan la Tierra, convirtiéndolos en misiles teledirigidos para estrellarse donde se quiera -, los villanos de turno mataron al jefe Gibbons (Samuel L. Jackson, quien no se dió por enterado que ésta no es otra película de Nick Fury), y ahora reclutan a Xander Cage para que la recupere. Claro, el tipo está muerto desde la película numero 2 ya que no le quisieron dar un aumento de sueldo a Diesel pero ahora se ven obligados a resucitarlo porque Ice Cube fue un reemplazo mucho peor, y porque Vin precisa recuperar otra franquicia para mantener el status de super estrella. La jefa ahora es una Toni Colette pétrea y pasada de testosterona que parece salida de un sketch de Saturday Night Live. Diesel recluta a un grupo de idiotas salvajes y adictos a la adrenalina (incluyendo a la carismática Ruby Rose), y van a tortearse con Donnie Yen y su equipo internacional que integra Tony Jaa (otro recuperado de la franquicia Rapido y Furioso) y Deepika Padukone. Verlos pelear es una delicia, aunque a veces las secuencias de acción sean ridiculamente exageradas. Tipos saltando de 30 metros de altura sin paracaidas y sin hacerse un rasguño, o nuestros héroes cascándose con los villanos en gravedad cero mientras un avión cae en picada porque el piloto está muerto (y durante media hora, con lo cual el avión debería venir cayendo desde Marte para no haberse estrellado antes) es tan idiota como suena.
En sí el problema no es la historia de fondo; la idea de los equipos de renegados y la Caja de Pandora es interesante, el drama es lo que el libretista inventó para llegar desde el punto A al punto B. Diálogos imbéciles, ridículas pruebas de machismo (como cuando juegan en un bar a pasarse la "papa caliente", solo que con granadas activas), fanfarroneadas estúpidas, la propaganda de la manía YouTuber de filmarse mientras cometen guarradas descomunales, y un montón de tipos idiotas dedicados a las apariencias y sin dos dedos de frente sobre lo que realmente pasa. "¿Viste mi pirueta?" en vez de "obtuve la caja de Pandora y salvé al mundo!".
En toda esta imbecilidad lo que termina funcionando - por insistencia - son las secuencias de acción. El tercer acto salva al filme de la quiebra precisamente porque es tan disparatado que resulta divertido. Donnie Yen es un héroe de acción fantástico y tiene los mejores momentos del filme, y la india Deepika Padukone irradia ferocidad aunque trastabilla cuando debe decir un parlamento en los momentos mas calmados. Y Tony Jaa hace cosas de Tony Jaa, y por eso nos deja contentos.
xXx: Reactivado es fast food cinematográfico: hueco, grasoso, pretencioso y para nada alimenticio aunque venga en packaging caro. No entiendo por qué es tan dificil escribir un puñado de parlamentos inteligentes o tratar a todos estos personajes como tipos con un mínimo de sentido común. La acción termina ganando la baza porque ya entra en el terreno de la parodia, y es re divertido ver a Diesel pateando traseros en gravedad cero o Donnie Yen baleando a medio mundo mientras flota en el aire (el tipo ya tiene mas de cincuenta; ¿qué esperan para importarlo a Hollywood y darle la super película que merece?). Pero, para que esto no sea un bochorno, tienen que conseguirse un libretista mejor, caso contrario xXx: Reactivado será simplemente debut y despedida del reciclado agente secreto que no termina por convencer a nadie con mas de 13 años de edad.