El musculoso Vin Diesel desciende a toda velocidad una colina sobre un skate para llegar a tiempo a colgar a la gente al cable así pueden ver el partido de fútbol. Así de bueno y de extremo es Xander Cage, el personaje que, claro, no tarda en ser llamado para servir a los servicios de inteligencia: no hay nadie como él cuando hay apuros importantes.
Sin personajes creíbles -ni siquiera la gran Toni Colette, en plan jefa dura, puede imprimirle un poco de humanidad al suyo-, sin más historia que el pavoneo de Diesel en largas secuencias posadas al ridículo, todo el tiempo deseado por las mujeres y cancherísimo con los enemigos. Alguna buena secuencia de acción, como la de la autopista de choque múltiple, no basta para hacer de xXx: Reactivado una experiencia olvidable al instante.