Muchas Preguntas, pocas respuestas
En su nuevo trabajo llamado Y… donde están los Morgan?, Marc Lawrence (Amor a segunda vista, Letra y música) vuelve a confiar por tercera vez en Hugh Grant como protagonista masculino, esta vez acompañado por Sarah Jessica Parker.
El film narra la vida de los Morgan, Meryl (Parker) y Paul (Grant), una exitosa pareja de Manhattan cuyas “casi” perfectas vidas tienen sólo un gran defecto: su matrimonio está a punto de derrumbarse definitivamente. Pero la locura de su vida romántica no puede ser comparada con lo que van a vivir cuando son testigos de un asesinato y se convierten en objetivo de un asesino a sueldo. El programa de protección de testigos del FBI los traslada desde su amada New York a un minúsculo pueblo de Wyoming, donde no tendrán más remedio que convivir.
Desde su inicio, el film pretende hablar sobre la vida en pareja, sus momentos alegres y sus dificultades, pero siempre de una manera muy pasatista, sin ahondar profundamente sobre este tipo de conflictos. Esta característica resiente la historia ya que en muchos momentos los protagonistas buscan “hablar seriamente”, pero esos instantes quedan en meras frases sin contenido, por la poca intensidad con la cual se expresan. A su vez, la porción de comedia nunca termina de explotar, tan sólo algunos parlamentos de Grant hacen sacar alguna sonrisa, más por su capacidad para realizarlos, que por la inteligencia de las palabras.
Más allá de estas fallas, la principal falencia que contiene el film es la falta de conexión, de química, que tiene Parker y Grant. Se nota claramente que nunca terminan de encajar como pareja, haciendo que todo se vuelva muy artificial y poco creíble. Si se hace una comparación, el gran éxito de Letra y música fue en gran parte por una excelente historia que mezclaba perfectamente el romance con lo musical, pero también por la excelente química que tenían Drew Barrymore y Hugh Grant, haciendo que la historia de amor fuera verosímil. Existen momentos donde pareciera que Parker y Grant sobreactúan la situación como para darle cierto matiz romántico a una trama que en gran parte transmite poco romanticismo. En determinados instantes, la pareja formada por Mary Steenburgen y Sam Elliott brinda más ternura y simpatía que el dueto protagónico.
Si se observa de determinada manera, se le podría haber “sacado más jugo” a esta trama que resultaba interesante, ya que los componentes que contiene eran atractivos. Sin embargo, Y… donde están los Morgan? en ningún momento llega a ser fascinante, no posee situaciones contundentes que puedan hacer movilizar al espectador y hasta en algunos tramos, aburre y molesta.
Representa cierta decepción que Lawrence hiciera una película con tan poco carácter y simpatía, después de su gran labor en Letra y música. Quizás sea sólo un tropezón en la carrera de este director que parece ser un especialista en comedias románticas, un género devaluado injustamente. Se espera un pronto regreso estelar de Lawrence para poder volver a disfrutar de estas geniales historias de amor y humor.