Una comedia que intenta hacer reir
El director Marc Lawrence, quien tiene en su haber algunos títulos bastante conocidos, como Amor a Segunda Vista (Two Weeks Notice) y Letra y Música (Music and Lyrics), ambos también encabezados por Hugh Grant -uno junto a Sandra Bullock y el otro con Drew Barrymore-. En este caso, comparte cartel con Sarah Jessica Parker, Sam Elliott y Mary Steenburgen.
La historia parte desde una pareja de clase alta de Nueva York, sumamente exitosos ambos, pero a punto de separarse y que en forma accidental son testigos de un asesinato.
La policía una vez conocido el hecho, intenta protegerlos de este peligroso asesino y deciden ponerlos en un programa de protección de testigos, típico de películas americanas. Esta vez la idea es llevarlos de la Gran Manzana, a un pequeño pueblo en las afueras del estado de Wyoming.
Con muchos temas que hablar y otros tantos que solucionar, Meryl (Sarah Jessica Parker) y Paul (Hugh Grant) Morgan, ahora con nombres nuevos y vidas flamantes comenzarán a reconstruir una relación que hasta ahora venía cuesta abajo.
Son pocos los momentos de verdadero humor y muy pocos los enredos, que hacen que la comedia pase de largo y se vaya transformando en un drama light. Sin duda el director no supo aprovechar a dos buenos actores y los recursos del lugar (como geografía, costumbres de pueblo, accidentes, etc). Más teniendo en cuenta que son una buena pareja para la comedia romántica y suman espectadores solo con poner sus rostros en la cartelera.
Elisabeth Moss, Michael Kelly, Wilford Brimley, Seth Gilliam, Kim Shaw, David Call, Chad Brummett, Henry Herman y Beth Fowler, son algunos de los actores secundarios, que junto a los protagonistas componen este film, que sin lugar a dudas será uno más, pero poco recordado en sus carreras.