Enseñanzas del amor
Basada en la novela homónima de Jojo Moyes, Yo antes de ti (Me Before you, 2016) tiene todos los ingredientes del drama romántico. Emilia Clarke y Sam Claflin conforman una pareja carismática en la película dirigida por Thea Sharrock.
Cuando es despedida de la cafetería, Louisa (Clarke) tiene que buscar rápidamente un empleo. Y no puede desperdiciar la única oportunidad de trabajo que consigue: cuidar a William Traynor (Claflin), hijo de una familia adinerada que quedó tetrapléjico producto de un accidente. Aunque los dos tienen personalidades distintas, el hecho de conocerse los ayuda; y ella intentará que él cambie su decisión sobre un tema importante.
Sharrock lleva a la pantalla grande una historia que atraviesa distintos sentimientos. Porque tiene la capacidad de divertir por momentos y de hacer reflexionar en otros. Por ejemplo, no faltan las típicas fiestas que se generan en las películas románticas a las que los protagonistas asisten vestidos para la ocasión, así como tampoco aquellas escenas que provocan una lágrima.
Clarke y Claflin interpretan correctamente a sus personajes y consiguen una química que se transmite. Sus escenas fluyen con naturalidad y logran que el público se involucre emocionalmente con la historia. Además, el faustoso castillo en el que vive Will le imprime pinceladas de época, aspecto que se complementa con el jubiloso y recreado vestuario de Lou.
Yo antes de ti es una película funcional a su género, pero su parte más débil es que algunas escasas situaciones resultan previsibles. Romanticismo, entretenimiento y drama convergen en una combinación que invita a reflexionar sobre las pequeñas cosas de la vida. Y principalmente, sobre el valor que les damos.