Daniel Blake es un carpintero de casi 60 años que por primera vez en su vida se ve obligado a acudir a los servicios sociales. Al caer enfermo por problemas cardiacos, solicita ayuda al Estado para poder subsistir. Comenzará entonces una odisea y se verá atrapado en un laberinto burocrático. Y es que, a pesar de que el médico le prohibió trabajar, la Administración lo obliga a encontrar un empleo o de lo contrario recibirá una sanción.
En su camino se cruzará con Katie, una madre soltera con dos niños, también con una situación personal complicada. Daniel y Katie intentarán ayudarse mutuamente y lentamente entablarán una relación profunda y entrañable.