Nati es una joven que vive con sus padres y su hermano Seba en un barrio marginal. Ambos trabajan haciendo repartos para el bar de su madre y pasan el resto de su tiempo con un grupo de amigos que suelen cometer robos menores. Cuando Nati se entera de que sus padres tienen una deuda que no pueden pagar intenta unirse a la banda para conseguir el dinero necesario que salve a su madre, pero ello se convertirá en un caos cuando sus amigos deciden asaltar un restaurant.
Nati desobedece al jefe del grupo, pone en peligro el plan trazado por los integrantes de la banda y es violada por el jefe de la pandilla en represalia. Convertida en una máquina de matar, Nati decide entonces vengarse eliminando a cada uno de los integrantes de esa banda.
El director Edgardo González Amer (El infinito sin estrellas, Familia para armar y Tuya) logró así un thriller violento en el que, sin embargo, sobresale la necesidad de su protagonista de ayudar a su madre. Martina Krasinsky, Leticia Brédice y Daniel Aráoz encabezan, con indudable calidad, el elenco de este film que habla de los deseos de venganza de esa muchacha envuelta, sin quererlo, en un laberinto sin salida.