10 años después de la primera película, el director Ruben Fleischer (Venom) logró volver a reunir al elenco principal compuesto por Woody Harrelson, Jesse Eisenberg, Abigail Breslin y Emma Stone para la tan esperada secuela. Escrita por Rhett Reese & Paul Wernick y Dave Callaham, “Zombieland: Double Tap” trae consigo un universo mejorado, donde los zombies evolucionaron de The Walking Dead a The Last Of Us y nuestros personajes deberán enfrentarse a una nueva aventura en la cual la acción, la comedia y el drama familiar no van a faltar.
Siempre se suele decir que las secuelas son tan malas como innecesarias y que, en ocasiones, arruinan la calidad de su antecesora. Pero, por suerte para Ruben Fleischer, este no fue el caso.
"Zombieland: Double Tap" nos vuelve a meter en un universo que podría funcionar como una parodia de The Walking Dead, donde la supervivencia en un mundo apocalíptico lleno de zombies se toma como un juego de Playstation regido por reglas para sobrevivir que mezclan lo coherente con lo absurdo.
Esta nueva secuela es similar a su antecesora, pero con algunas variaciones. En su presentación, nos cuentan que los zombies evolucionaron (sorprendentemente más que Wichita, que 10 años después de estar con la misma persona le sigue teniendo miedo al compromiso) y que a estos nuevos especímenes los llaman T-800 y Homer, por Terminator y Homero Simpson.
Luego, meten en la historia nuevos personajes secundarios que, aunque por momentos pueden parecer relleno, permiten que esta nueva trama avance y se desarrolle, siendo sus aportes necesarios para el desenlace final. Entre ellos, destaco a Madison, interpretada por Zoey Deutch, quien es el perfecto estereotipo gastado de rubia tonta, pero que funciona, porque la utilizan como recurso cómico al ser un personaje que queda fuera de contexto y es incapaz de adaptarse a él. Incluso depositan gran parte de la comedia del film en ella, quitándole minutos a Abigail Breslin (Little Rock), quien fue prácticamente dejada de lado, y a Emma Stone (Wichita) que tampoco pudo lucirse por su limitado tiempo en pantalla y el nulo desarrollo de su personaje. Y si de actuaciones hablamos, también hay que destacar, junto con Zoey, la interpretación de Jesse Eisenberg, que vuelve a realizar su interpretación de Columbus, el neurótico que aporta las reglas al film (y la voz en off).
Tras 10 años de espera, con un guión simple pero entretenido, "Zombieland: Double Tap" es una secuela aceptable, que cuenta con más acción que humor e incluso un mayor nivel de calidad en cuanto a aspectos técnicos. A pesar de que la moda de los Zombies, en la cual nació su antecesora en el 2009, ya paso, lograron que funcione igual. Hay que tener en cuenta que la importancia de la trama es nula, y se nota que esto es adrede. Es una película para no prestar mucha atención. Recomendable para desconectar, reirte un poco y disfrutar del rato.
Ah, y tiene una escena post creditos bastante larga y divertida. No se olviden de quedarse a verla.
Por Estefanía Da Fonseca