Zootopia

Crítica de Diego Serlin - Todo lo ve

Tras la ingeniosa "Intensa-mente" y el traspié de "Un Gran Dinosaurio", Disney vuelve al ruedo con otra genialidad en la que mucho tienen que ver sus directores Richard Moore -"Los Simpson", "Futurama", "Ralph el demoledor"- y Byron Howard -"Bolt", "Enredados"-, así como el aporte de Pixar que además del perfeccionismo en la animación busca poner siempre el acento en la expresividad de los personajes.

Disney retoma una de las principales características de su cine, confiriendo a los animales sueños, miedos, fracasos y éxitos, y los eleva a un plano aun mayor ubicándolos en una moderna metrópolis al estilo de New York donde conviven todas las especies de animales, tanto depredadores como presas, en perfecta armonía, dotando de conductas y una condición humana a un mundo donde sólo habitan los animales. Así es como Judy, una conejita que a pesar de los mandatos familiares y prejuicios sociales, sigue su sueño de ser policía e incorporarse a la fuerza en la gran ciudad, donde los animales de todas las especies –a excepción de las aves y reptiles que no figuran en la historia- conviven armoniosamente desde hace muchos años. Pero cuando llega a Zootopia descubre que perseguir su sueño y demostrar quién es no será nada fácil. No tardara en involucrarse en un complicado caso policial e incorporar como compañero nada menos que al archienemigo de los conejos, un zorro charlatán y estafador. Zootopia combina el ingenio y ocurrencia en cuanto a los detalles de animación -Los autobuses tienen puertas y asientos de todos los tamaños tanto para jirafas como para ratones, las computadoras y celulares con el logo de una zanahoria, los diferentes paisajes y lugares emblemáticos de new york parodiados en la gran urbe, entre otros-, con personajes queribles y una trama que propone aventura, acción, humor, giros hacia el thriller y el policial muy bien resueltos; con diálogos sin desperdicio, burlándose de las parejas en las comedias policiales; homenajes a Vito Corleone de El Padrino; guiños claros a Breaking Bad; referencias a viejas y nuevas películas del estudio e, incluso, una sátira amable a la cultura pop y sociedad norteamericana -encarnada en el personaje de Gazelle, a la que pone voz la cantante Shakira.-. Todo esto adobado con los infaltables mensajes sobre perseverancia, amistad, tolerancia y respeto característicos de Disney.Todos y cada uno de los animales y situaciones que aparecen enZootopia funcionan a la perfección, desde la entrañable y pertinaz conejita, pasando por el zorro estafador, la vice alcaldesa oveja, los lobos contagiándose aullidos como bostezos, el club nudista para animales, la oficina de tráfico cuyos funcionarios son osos perezosos y algunos personajes marginales, entre otros, y sirven para desmontar algunos estereotipos sobre ciertas especies animales y exponer una reflexión sobre la condición humana de la sociedad actual. Un alegato contra los prejuicios y la discriminación basada en criterios de raza, sexo y condición social.Zootopia fluye de principio a fin con buen ritmo, mezclando hábilmente los géneros y entreteniendo por igual a todas las edades, con la moraleja para adolescentes y un final sin príncipes redentores y lecturas interesantes para los adultos