Adam, un joven pescador de una humilde familia, queda atrapado sin intención en medio de una disputa de poder tras la repentina muerte del Gran Imán, líder del Islam Sunita en la Universidad de Al-Azhar La nueva película del Director Sueco Tarik Saleh que ya nos había sumergido en el mundo de la corrupción en el exitoso Thriller “Crimen en El Cairo”, nuevamente filma en Egipto, pero esta vez en lugares menos convencionales. En esta Universidad de El Cairo la política, el poder y la religión empiezan a jugar en el mismo equipo tejiendo conspiraciones que suman personajes siniestros y mantienen la tensión de un mundo perturbador. A medida que Adam comienza a involucrarse, va quedando en evidencia el lado más oscuro de la religión y la hipocresía humana. Sin entrar en un suspenso profundo, la trama posee fuertes diálogos, un inteligente guion y personajes con muchos matices que atraen al espectador. Muy bien recibida en el Festival de Cannes, la película con ciertas situaciones convencionales, dentro de lugares en general desconocidos, resulta interesante, y se fortalece gracias a la maravillosa interpretación de Fares Fares.
Vin Diesel vuelve a la pantalla grande con uno de los personajes más icónicos de su carrera: Dominic Toretto, el protagonista del film dirigido por Louis Leterrier que este jueves estrena su secuela número 10, “Rápidos y Furiosos X”. Con su trama infalible y la exagerada mezcla de acción y efectos especiales que ya son característica de la saga, la película que reúne a miles de fanáticos en el mundo regresa para presentar al oponente más letal que alguna vez enfrentó la familia. Se trata de Dante Reyes, encarnado por Jason Momoa (Aquaman), quien se destaca ampliamente sobre el resto con su impecable interpretación de un malo tan psicopata como inteligente y gracioso. Es la gran incorporación de un film que continúa estirando su trama sin reparar en hacer cambios significativos en la fórmula que los llevó al éxito. A lo largo de las más de dos horas que dura, no faltan las carreras de autos con trucos inverosímiles, las peleas, los ataques y alguna que otra escena de amor entre tanto caos. La combinación que entretiene y nunca falla. En conclusión, un poco más de lo mismo. Pero la 10ª secuela de Rápidos y Furiosos confirma que la historia -por más reiterativa que sea- si se le suma algún condimento extra sigue cautivando al público como el primer día.
La mejor voz de la historia vuelve a sonar. Esta vez en el cine, donde “Quiero bailar con alguien” -el film dirigido por Kasi Lemmons- trae al presente todos los éxitos de Whitney Houston para dejar inmortalizado en la pantalla grande tanto su inigualable talento como su vida. Naomi Ackie es quien se pone en la piel de la cantante mujer más galardonada de todos los tiempos durante las casi dos horas y media que dura la película, en la que se relata desde los comienzos de su carrera musical hasta su realidad abajo del escenario, donde el drama la envolvía. En cada etapa de la vida de Whitney, la interpretación -y la personificación- de la actriz es impecable: logra situar al espectador en cada nuevo contexto que se presenta y transmitir las emociones que atravesaban a la cantante con el pasar de los años. No obstante -y a pesar de la larga duración del film- el guión pareció estar más centrado en los momentos musicales y no tanto en darle profundidad a la historia de la artista. Hay épocas que están relatadas muy por encima y hace perder el hilo de su vida, que es fundamental para la biopic. Entre otras actuaciones, también cabe destacar la interpretación de Stanley Tucci como Clive Davis -productor discográfico y amigo de Whitney-, Ashton Sanders como Bobby Brown y Tamara Tunie como su madre. Estrenada este jueves, a dos días de que se cumpla un nuevo aniversario de su trágica muerte (11 de febrero de 2012), “Quiero bailar con alguien” -o ‘I Wanna dance with somebody’, como dice su icónica canción en inglés- no es una producción magistral, aunque sí una película buena y entretenida para volver a disfrutar a la gran Whitney Houston.
En su tercera entrega Rock Dog vuelve a traernos a Bodi (Graham Hamilton) con su singular estilo, siempre buscando la armonía y un clima de amistad entre los animales. Pero no todos están contentos en un mundo sin conflictos por lo que, deciden crearlos. Un programa de talentos, “Battle the Beat” ofrece una atractiva recompensa. Allí Angus Scattergood (Eddie Izzard) es jurado, y se convierte en la herramienta para buscar peleas y enemistades. Sus participantes compiten sanamente por el gran Premio mientras se exhiben diferentes ritmos y estilos. Pero sus organizadores tienen otras intenciones ocultas para el reality televisivo. Bodi decide convertirse en jurado al enterarse que Angus desapareció y una banda que participa no conoce nada de rock. La película animada, dirigida por Anthony Bell es para toda la familia, pero sobre todo, se orienta a los más pequeños debido a la temática y su forma de abordarlo. El guion de Rob Muir es demasiado simple y por momentos poco claro, pero entretiene gracias a la música de Richard Evans y Matthew Gerrard para los cuadros que suman y divierten a los niños.
Una nueva película de superhéroes llega a los cines de la mano de DC. Se trata de Black Adam, el último film de Jaume Collet-Serra protagonizado por Dwayne Johnson. Con guion de Adam Sztykiel y Rory Haines & Sohrab Noshirvani, la ficción gira alrededor del mítico Teth Adam. Pasaron 5.000 años desde que el personaje de The Rock obtuvo los poderes supremos de los antiguos dioses y fue encarcelado. En la actualidad, una misteriosa mujer lo libera de su tumba terrenal, desatando a este antihéroe que busca justicia en el mundo moderno con peligrosas estrategias. Antes de enfrentarse al real villano, conocerá a un equipo de héroes conformado por Aldis Hodge como Hawkman, Noah Centineo como Atom Smasher, Quintessa Swindell como Cyclone y Pierce Brosnan como Dr. Fate. De esta manera, deberán convencer a Black Adam de encontrar la liberación de su pueblo con otros métodos. La cinta consigue sostener su ritmo a partir de unas cuantas escenas a pura acción que se suceden una detrás de otra. Pero aunque su componente adrenalínico transforma a este lanzamiento de Warner en un producto entretenido, su trama resulta inconsistente. Sus secuencias -con exagerado CGI- se ven sobrecargadas de efectos especiales y disputas, olvidando un importante elemento: el suspenso. En este sentido, Black Adam no ofrece una historia atrapante o cargada de humor como Dwayne Johnson tiene acostumbrado a su público. Por el contrario, no logra profundizar demasiado en ninguna de las temáticas que intenta atravesar, dejando más de un cabo suelto y limitándose a ser una propuesta meramente pochoclera.
Tras décadas de silencio, la cineasta investigadora y feminista Susana Nieri trae a la pantalla grande la historia de un impactante caso de abuso sexual infantil ocurrido en Mar del Plata. Abordado por medio de la ficción como un thriller dramático, “Algo Incorrecto” es el primer largometraje de Nieri como forma de combatir contra la impunidad, el silencio y el abuso de poder. Luego de haber realizado varios documentales anteriores que abordan la violencia de género (Gotas de lluvia, Ella se lo buscó y El toro por las astas), Nieri continúa con esta misma temática como guionista y directora de su primera ficción a partir del caso real de Edmundo O’Neill, un juez de Mar del Plata denunciado por abuso sexual infantil por más de una veintena de mujeres. Los abusos fueron cometidos durante la última dictadura militar, y si bien la Justicia de Mar del Plata había recibido en 2004 la primera denuncia, la investigación de la causa quedó extinguida por prescripción del delito. O’Neill falleció sin juicio ni condena en noviembre de 2016. Es por ello que a partir de este caso que la cineasta Nieri se embarca en este conmovedor relato, encabezado por Eleonora Wexler, César Bordón, Maru Cesanelli y Stella Matute, como modo de reparación y justicia. Por medio de una producción y ejecución simple, de planos limpios y con características propias del género documental, Niere construye un relato que busca la visibilización de este delito tan impunemente silenciado. Con la suma de material archivo del XXX Encuentro de Mujeres llevado a cabo en la ciudad marplatense, el filme retrata también la “marea verde” y su rol fundamental en la historia del caso, ya que es a partir del 2015, con el contexto del Ni Una Menos, en donde ha tomado un mayor impulso y fuerza hasta convertirse hoy en una ola imparable contra el sistema patriarcal y machista. Si bien no es un proyecto audiovisual que destaque especialmente por su cinematografía, si es relevante por su temática y su denuncia, sobre todo, como una esperanza de lucha y justicia para las miles de víctimas sobrevivientes del abuso sexual infantil.
Tras escándalos, rumores y una polémica presentación en el Festival de Venecia, Don’t Worry Darling llegó a los cines. Olivia Wilde, que presentó su ópera prima Booksmart en 2019, deja atrás la comedia adolescente para involucrarse en una cinta mucho más ambiciosa, aunque también, confusa. El film presenta a Alice y Jack, una pareja que disfruta de su rutina en la idealizada comunidad de Victoria. Es, en realidad, una ciudad experimental ambientada en los años 50 en la que los hombres parten cada día con el objetivo de trabajar en un proyecto confidencial que les permite mantener este nivel de lujo. Sin embargo, aparecen grietas que podrían demostrar que existe algo oscuro y retorcido en este aparente paraíso. No quedan dudas de que se trata de un gran desafío para la cineasta detrás de No te preocupes cariño: no solo es su segunda película en este rol, sino que además se desempeña frente a las cámaras en un papel secundario. Es necesario reconocer que, a nivel visual, la película resulta impecable. Aquel mundo ideal en el que Wilde introduce a su audiencia, está excelentemente construido a partir de su escenografía, sus locaciones, su iluminación y su impactante vestuario. Ahora bien, al centrarse en la trama, se trata de una enorme decepción. Aunque el póster remita a una historia romántica, es por el contrario una producción que intenta acercarse a largometrajes de la talla de The Truman Show o Get Out. Y aquí aparece la gran falencia del guion de Katie Silberman: intenta abarcar un sinfín de temáticas sin lograr profundizar demasiado en ninguna de ellas. En cuanto a las actuaciones, merece un párrafo aparte la nominada al Óscar Florence Pugh, que resulta hipnótica en su rol protagónico. Por su parte, Harry Styles la acompaña correctamente, pese a que en los momentos dramáticos deja en evidencia la falta de experiencia en este tipo de proyectos. Una desaprovechada Gemma Chan y un acertado Chris Pine completan el reparto de esta propuesta opacada por sus propios escándalos
Para planear el crimen más atroz de la humanidad, sólo tardó una reunión de 90 minutos. De esta forma es como Matti Geschonneckes nos invita a formar parte de aquel infame comité llevado a cabo en la mañana del 20 de enero de 1942, en la pintoresca villa del lago Wannsee, Berlín. “The Conference” es un fiel y preciso retrato alemán de la histórica Conferencia de Wannsee, cuyo único tema fue lo que los nazis llamaron “La Solución Final a la Cuestión Judía”: la organización del asesinato masivo y sistemático de millones de judíos en toda Europa. A partir de la única copia existente del acta de la reunión, registrada por Adolf Eichmann, Geschonneckes nos presenta un minucioso filme que sigue el minuto a minuto del protocolo original de cuando la humanidad perdió la guerra. La película se basa meramente en el escalofriante diálogo sin tapujos de las viles, calculadas y técnicas ideas de los destacados representantes del régimen nazi. Con actuaciones espeluznantemente creíbles y sutiles, y con una ejecución fina y totalmente minimalista, el director realiza un revisionismo histórico por medio de un chocante contraste de lo que pareciera ser una conversación casual sobre un genocidio en donde el espectador forma parte. Con un sólo escenario, y sin banda sonora que acompañe, Geschonneckes consigue obtener un film verdaderamente aterrador y profundamente angustiante que, aún sabiendo de las atrocidades cometidas durante el régimen nazi, logra ser impactante de ver y difícil de digerir. Sin siquiera presentar un momento de violencia explícita o de material de archivo en la pantalla, “The Conference” consigue evidenciar el inigualable e imponente poder del lenguaje y de la palabra: la construcción de una despreciable violencia simbólica igual de equiparable a los actos y delitos posteriormente cometidos. Es el horror mismo representado por medio de una discusión casual de palabras frías y de faltas de compasión que no dan lugar a otra cosa más que lidiar crudamente con una verdad insondable.
Basada en la serie “Tierra de Rufianes”, llega el estreno de un ambicioso proyecto que marca un nuevo precedente en la historia de la producción animada argentina. Bajo la dirección de Fernando Sirianni y Federico Breser -director de la serie-, “El Paraíso” cuenta una trágica historia de amor, traición y venganza que toma inspiración en hechos ocurridos en la convulsionada Rosario durante los años veinte, ciudad apropiada por la violencia de las mafias y sus turbulentos negocios ligados al tráfico y explotación de mujeres. Por medio del enorme desafío de narrar un drama bajo el formato de animación 3D, y con una clara influencia narrativa y estética del género film noir, la película consigue construir, con una cierta base histórica, la oscuridad y perversión que hay dentro del negocio de la prostitución. Contado desde el presente y a partir de sus dolorosos recuerdos, Magdalena Scilko se convierte en un testigo clave al comenzar la investigación del triple crimen de los Abramov, una organización familiar-criminal que manejaron durante décadas la red de prostitución más grande de Rosario. Magdalena le relatará al periodista investigador cómo ella y su hermana Anna arriban a la ciudad portuaria desde Polonia con la promesa de un mejor futuro, cómo se vuelven víctimas del negocio explotador de los Abramov, y cómo, dentro de ese contexto desgarrador, nace su historia de amor con Ian Abramov. De impronta violenta, la película logra obtener, aún con los recursos tecnológicos limitados pero usados de forma inteligente, una interesante estética visual (mejor lograda en las instancias monocromáticas), y consigue construir un clima de suspenso y de drama muy propio del género. “El Paraíso” es la primera película argentina en ser realizada íntegramente con Unreal Engine, y cuenta además con las increíbles voces de Norma Aleandro, Nicolás Furtado, Maite Lanata, Alejandro Awada, Jorge Marrale, Mariano Chiesa, Cesar Bordón y Ernesto Larrese; y con la participación especial de Elena Roger, Favio Posca y Juana Viale.
Basada en la novela homónima del periodista Reynaldo Sietecase, “Un Crimen Argentino” llega a las salas de cine bajo la dirección de Lucas Combina, realizador de “La Chica que limpia”, serie ganadora del Premio Martín Fierro Federal de Oro y de Mejor Ficción Federal. Combina obtiene un buen debut en la pantalla grande con este atrapante thriller de investigación criminal basado en un hecho real ocurrido en la ciudad de Rosario en 1980. "Mientras sea desaparecido no puede tener ningún tratamiento especial, es una incógnita, es un desaparecido, no tiene entidad, no está." Es con el fragmento del conocido e infame discurso de 1979 del dictador Videla lo que da comienzo al filme. Es que se debe a que la ópera prima de Combina reconstruye el caso de la misteriosa desaparición de un acaudalado empresario bajo unas muy sospechosas circunstancias. La investigación es liderada por dos jóvenes secretarios de un juzgado de instrucción, González Rivas y Torres (un correcto Nicolás Francella y un destacado Matías Mayer), que cuentan con la tutoría del juez Suaréz (un excelente Luis Luque) y con la ayuda de su colega (la espléndida Malena Sánchez). Con el factor del tiempo jugando en su contra, ambos juristas intentarán resolver el caso enfrentando las interferencias del equipo de policias de Cerbera (Alberto Ajaka), que están subordinados al teniente coronel Ríos (el impecable César Bordón) y al poder represor. “¿Sin cuerpo no hay delito?” es el hilo conductor del film, que con una lograda ambientación de la época, consigue representar el clima hostil que se respiraba en aquel entonces durante la última etapa de la dictadura militar. Con un gran elenco, que se termina de completar con Darío Grandinetti interpretando al principal sospechoso Márquez y con la participación especial de Rita Cortese, la película de Combina resulta interesante y entretenida, y cuenta con algunos tintes de humor y de referencias rosarinas. Y si bien quedan algunos cabos sueltos, no impide destacar que “Un Crimen Argentino” consigue tener una singularidad propia y que logra aportar algo nuevo dentro del género.