Un género, todos los géneros
Aunque aún no ha alcanzado la masividad que sí suelen conseguir las producciones hollywoodenses, el cine de terror argentino continúa creciendo. Tras el reciente estreno de Necrofobia, llega 2/11 Día de los muertos, nueva incursión en el cine de género de un permanente cultor del mismo como el formoseño Ezio Massa (Más allá del límite, Cacería, Villa).
En este caso, a partir de un guión coescrito con el periodista Sebastián Tabany, Massa narra una historia de pueblo chico-infierno grande que abreva en diferentes tópicos (varios de ellos constitutivos) del fantástico, el thriller psicológico, el policial, el drama familiar, el slasher, etc.
Un joven aparece desnudo y ensangrentado en plena ruta. Un hombre veterano les cuenta a los vecinos (incluidos varios niños) una leyenda ligada a una loba que atrae a y arrasa con unos perros en pleno bosque. Así arranca 2/11 Día de los muertos, película que trabaja en diferentes tiempos y líneas narrativas en general con buenos resultados, aunque no todas las resoluciones sean igual de convincentes y por momentos pierda cierta cohesión y solidez.
En el centro de la escena está la desaparición de un grupo de tres amigos y, también, un triángulo afectivo entre dos hermanos enfrentados entre sí, un policía del pueblo llamado Santiago (Juan Gil Navarro) y Elías (Nicolás Alberti), y una mujer (Agustina Lecouna) que fue la esposa del primero y hoy es la amante del segundo. Los dos muchachos deberán dejar las diferencias de lado para avanzar en una investigación y demostrar que Elías no es un asesino.
Con elementos, referencias y encuadres que remiten a los autores ochentistas que son los héroes cinéfilos de Massa (con John Carpenter a la cabeza) y a partir de un vistoso trabajo estético que genera climas ominosos y sugerentes, 2/11 Día de los muertos termina trascendiendo sus desniveles para convertirse, en definitiva, en un buen exponente de un género que busca su definitiva consolidación.