El prolífico actor francés Louis Garrel (hijo del gran cineasta Philippe Garrel), de tan solo 36 años, suma su segunda experiencia como director y co-guionista en el film “Amante fiel”. El mítico Jean- Claude Carrière es el otro guionista involucrado en esta película que se exhibió en el pasado BAFICI, donde Garrel ganó el premio a la mejor dirección.
Protagonizada también por el propio director, “Amante fiel” cuenta la historia de un trio amoroso que completan Laetitia Casta, una actriz de vasta carrera, y la joven Lily-Rose Depp (hija del célebre Johnny Depp).
Marianne y Abel son pareja. Un día ella le confiesa que está saliendo con Paul, uno de los mejores amigos de Abel. Y no solo eso, además espera un hijo de su amante y está dispuesta a casarse con él. Se separan y tras varios años, Abel se entera que Paul ha muerto de un inesperado paro cardiaco. El
reencuentro de ambos se da en el funeral. Allí las emociones vuelven a florecer, pero Eve, la hermana de Paul, no parece estar muy contenta con esto.
Es extraño el enfoque de “Amante fiel”, porque comienza como un drama que rápidamente se transforma en una tragicomedia y que tiene incluso hasta algún coqueteo con el thriller. Así va pendulando la nueva película de Louis Garrel, plagada de personajes indecisos que van y vienen durante sus muy cortos 70 minutos.
Los personajes de Garrel están desesperados por amor. Llevan sus emociones a lo extremo, una regla clara del melodrama, se enredan, se pelean, y se mueven como bien podrían hacerlo los personajes del cine de Woody Allen.
Desde el minuto 1 nos queda claro que el objetivo de Garrel es construir una cinta al estilo ‘Nouvelle Vague’. La voz en off se hace protagonista principal del relato y funciona como ordenador y distribuidor de la información. Pone en palabras lo que vemos en imagen y refuerza las emociones. Esos amagues a entrar por el terreno de lo policial son llevados simpáticamente por Garrel quien nunca se los toma demasiado enserio, pero le sirven para darle algún enredo más a la historia. Ese roce con los géneros clásicos es otra de las cosas que tanto ha caracterizado a la corriente francesa, pero “Amante fiel” siempre tiene bien en claro lo que a fin de cuentas es, una comedia romántica con bastante humor negro.
El film nunca termina hundiéndose en el tono dramático que el comienzo podría sugerir. Esa densidad acaba siempre alivianada por rápidos chistes y situaciones que van llevando la historia para otro terreno.
Sin ser grandiosa ni compleja, “Amante fiel” es una buena y bienvenida segunda película del cineasta Louis Garrel. La sombra de su padre es grande, pero Louis de a poco ha encontrado un estilo de narrar sus historias bastante bello. Si ganará un poco de profundidad seria aún mejor. Una película francesa de cepa.