Un personaje fantástico que muestra aristas inquietantes en varios momentos del film, cuya trama mantiene la tensión todo el tiempo.
Las películas de Federico Veiroj son retratos de personajes ordinarios que poseen alguna característica extraordinaria que los vuelve interesantes. En “Así habló el cambista”, el protagonista -notable trabajo de Hendler- es un tipo que compra y vende divisas y saca ventaja, en Uruguay, de las sucesivas crisis económicas que vive la Argentina.
Pero ese hombre, que parece de una simplicidad que no es tal, es también alguien ajeno al mundo que lo rodea, un manipulador. Un personaje fantástico que muestra aristas inquietantes en varios momentos del film, cuya trama mantiene la tensión todo el tiempo.
Ese rasgo extraño, peligroso o excéntrico, que asoma detrás de la más crasa normalidad, logra en esta película plasmarse con absoluta fluidez.