Realizado por Eduardo Montes-Bradley, el presente ejercicio documental nos trae el viaje continental llevado a cabo por Pablo Tabernero, seudónimo de Peter Paul Weinschen, fotógrafo de cine que se formó junto a los pioneros de la disciplina en la Bahaus. Proveniente de una familia de judíos alemanes, llegó a Argentina en los años ’40. Fue un maestro del blanco y negro que dejó centenares de imágenes grabadas en la retina. Este influyente DF de la frondosa etapa clásica del cine nacional, es el responsable de la fotografía de películas como, por ejemplo, la esencial “Prisioneros de la Tierra”. Su arte iluminó visionarias trayectorias de directores como Hugo Del Carril, Luis Saslavsky y Hugo Christensen, entre muchos otros. Sin embargo, la mirada del director se encamina notoriamente hacia otra dirección. Y lo hace bajo el siguiente interrogante: ¿quién fue Tabernero antes de convertirse en el artista que todos conocimos? Los límites de la investigación son puestos a prueba por este documental. El proceso creativo adquiere dimensión de pesquisa policial. Montes-Bradley indaga en las penurias del siglo XX que le tocó vivir a este camarógrafo de películas españolas, durante su estancia en Barcelona. Reclutado durante la Guerra Civil, testimonió la confrontación mientras se maravillaba leyendo Don Quijote. Mil y un aventuras atestiguan su tránsito nómade, huyendo de Alemania a la llegada del nacionalsocialismo, en el vértice de dos guerras. Arribó a Buenos Aires como refugiado; décadas después emigraría a Estados Unidos. Un auténtico trotamundos. “Buscando a Tabernero” ilustra la perfecta paradoja de su hoja de ruta de vida, al exilio que comenzara con ‘la noche de los cristales rotos’ en Berlín y termina con ‘la noche de los bastones largos’ en el suelo nacional, trazando el destino una parábola que grafica la tumultuosa vida política de un siglo atravesado por el fascismo.