Castanha

Crítica de Diego Lerer - Micropsia

De lo mejor de la reciente producción brasileña, esta película cruza una y otra vez las fronteras entre documental y ficción para narrar la historia de un hombre que se viste de mujer por las noches para ser maestro de ceremonias en fiestas gay (“Castanha” es su nombre) y al que se lo ve en su vida cotidiana, más que nada en su relación con su madre, quien con sus observaciones y comentarios se termina convirtiendo en casi tan protagonista del filme como él.

La relación entre ambos, el trabajo y los sueños de estrellato por lo general frustrados de él (aunque tiene una nueva oportunidad) se combinarán con la tensión que genera la presencia circundante de otro miembro de la familia, adicto, que vive en las calles pero vuelve siempre a pedir dinero o a robar. Partiendo del documental más puro de observación (vemos las protestas callejeras en Brasil por TV), la película va integrando estos universos de ficción en los que se mueve Castanha: del escenario al backstage, de sus pruebas como actor hasta el manejo de su drama familiar que también se mueve en terrenos limítrofes entre ambos registros. Una gran película que pasó por la Berlinale y estuvo en competencia en BAFICI.