Luego del anunciado retiro de Steven Soderbergh, finalmente llega su última producción. La carrera del prometedor y joven director nacido en Atlanta comenzó oficialmente con un video documental de la banda Yes. Poco a poco y un par de cortos de por medio, se hizo camino hacia su primer largometraje conocido como Sexo, mentira y video. No repercutió demasiado en taquilla ni popularmente, pero más de uno vio en Soderbergh un potencial que hace mucho no se veía en Hollywood. Tuvieron que pasar un buen par de films (algunos de ellos realmente muy buenos como Un romance peligroso y Vengar la sangre) hasta su primer gran éxito parejo tanto en taquilla como critica: Erin Brockovich. Esta película estrenada en el año 2000 fue mucho más que un brillante vehículo para llevar a Julia Roberts al Oscar.
Retrataba la lucha de una mujer sola contra la impunidad de las grandes industrias. Ese mismo año el buen Steven parecía inquieto y sobre productivo cuando al poco tiempo estrenó quizás su obra maestra protagonizada por Benicio Del Toro y Michael Douglas entre otros. Traffic le significó a Soderbergh el reconocimiento unánime como el excelente director que es. El niño prodigio de Hollywood había madurado para convertirse en un serio realizador, y fue gracias a Traffic que obtuvo su reconocimiento como mejor director de ese año por los Oscars de la academia.
En el medio pasaron muchas producciones interesantes como La gran estafa, Solaris, Che Parte I y II y unos cuantos etcéteras más. Pero hace unos pocos años atrás Soderbergh manifestó su cansancio con la industria cinematográfica y anunció sus últimas producciones. Para sorpresa de muchos el director empezó a encadenar estrenos de películas completamente intrascendentes como La Traición y la casi vergonzosa Magic Mike. De esa camada de películas se desprende Efectos Colaterales, la presuntamente última de las anunciadas. Con el antecedente inmediato de venir de una serie de fracasos, pero a la vez conociendo el talento que tiene el director como autor, uno podía ir a ver Efectos Colaterales esperando cualquier cosa. Por suerte para todos su última película es un digno final a una (en resumen) buena carrera cinematográfica.
La película está dividida en dos partes principales. La primera mitad es práctica y exclusivamente un drama en el cual se presenta a una protagonista uncida en una vida de depresión y amargura. Pero a medida que avanza la historia, este drama psiquiátrico donde se pone mucho en tela de juicio el uso de los fármacos psicotrópicos, va mutando hacia la segunda parte de la historia que de la mano de Catherine Zeta Jones y Jude Law se transforma en un Thriller policial cargado de puntos de giro. Efectos colaterales es indudablemente un interesante fin (o con un poco de suerte, un paráte) a la carrera del (ya no tan) niño prodigio de Hollywood.