¡Eso Vive!
El Dedo es la ópera prima del director Sergio Teubal, una nueva cara en el cine argentino, que decide debutar con esta comedia negra de toques bizarros, que mezcla superstición, puja política, asesinato, ignorancia y algunas cuestiones más que la convierten en una interesante variante a la cartelera actual, sobre todo para los que están podridos de tanto blockbuster pochoclero.
La película cuenta la historia de un pueblo cordobés, más específicamente del Cerro Colorado, que al nacer el habitante número 501, queda habilitada para poder elegir, mediante el voto popular, al intendente de la comuna. El nudo se hace presente cuando uno de los posibles candidatos, Baldomero, es asesinado misteriosamente, situación por la cual su hermano Florencio, decide cortar el dedo índice del cadáver para que de alguna manera le señale quien ha sido el verdugo. Como se podrán imaginar, este acto de superstición llevará al film por caminos que raya lo absurdo y lo bizarro, jugando con escenas de los que teóricamente fueron los protagonistas reales de la historia.
Protagonizan Fabián Vena (Florencio), Gabriel "Puma" Goity (Hidalgo), Martín Seefeld (Baldomero) y Mariana Brisky (Franca). Como gran crítica a la cinta, remarco el abuso de actores porteños para interpretar a cordobeses... si bien creo que el esfuerzo de algunos es más que respetable, nunca un actor de Buenos Aires va a poder sacar la tonada cordobesa sin parecer forzado... lamentablemente es así, no es una tonada fácil. Es verdad que un Fabián Vena atrae mucho más público que un Gustavo Almada ("Laucha" en De Caravana), pero es momento, sobre todo con el auge del cine cordobés, de que se comience a tener seriamente en cuenta a los actores locales, sobretodo si se quiere hablar de una historia de Córdoba.
En otra nota, el humor negro y ácido es por momentos maravilloso, aunque no es constante durante los 96 minutos del film. Personalmente, no lo soporto a Gabriel Goity con esa vocecita irritante que pone a sus personajes desde que tuvo un poco de éxito en "Los Roldán", creo que ya choreó bastante con eso y su actuación me resulta muy artificial. Una muy buena sorpresa para mí fue Mariana Brisky que le da un cierto ángel a la película, y por supuesto Fabián Vena que resalta durante toda la cinta y le sube definitivamente varios puntos a la historia contada por Teubal.
¡Yo les diría Precaución! No es la típica comedia argentina, y puede llegar a pasar lo que a muchos les sucedió con "Los Marziano", que fueron con un pre concepto de comedia que les impidió disfrutarla. Es un poco rara, sí, pero también es una respetable representante del buen momento que está pasando el cine argentino.