Eleven las vigas, carpinteros
“Levantad, carpinteros, las vigas del tejado” – Safo. El jardín secreto / documental sobre la poeta Diana Bellessi (2012) refiere a la pequeña isla en medio del Paraná en la cual buscó refugio la poetisa Diana Bellessi; lo hizo durante la Dictadura en los ‘70s y lo sigue haciendo desde entonces, dejando detrás Buenos Aires en busca de resquicio e inspiración. En esta ocasión el viaje ha sido documentado por tres realizadores: Cristián Costantin, Diego Panich y Claudia Prado.
El documental retrata el proceso creativo de Bellessi, que redacta versos y los lee a cámara en tiempo real, así como su pasado como intrépida soñadora en el marco de la Dictadura. Bellessi es todo un personaje a seguir con la cámara encendida – sabe encontrar el humor allí donde el tabú suele callar a la gente, a su edad se mueve con energía y resolución, y habla con claridad, ya sea recitando su poesía o reflotando viejas anécdotas junto a sus amigos. La conocemos activa en una marcha de la Federación Argentina LGBT frente a Congreso y luego le asistimos a la rutinaria labor de mantener su jardín secreto a hachazos y baldazos.
Al documental se suman algunas breves cortinas de animación, compuestas de recortes de dibujos de Bellessi de niña. En su inocencia van de la mano con el resto de la película. Los realizadores retratan no una problemática sino su resolución, muchos años luego del devenir. Bellessi, personaje admirable, sostiene su película con carisma, pero a lo largo de la misma persiste un tono plácido y melancólico que termina por ubicar a la película en una especie de meseta.
Sencillamente no hay conflicto que movilice o tensione el documental en la actualidad. A Bellessi se la presenta tan cómoda en su patio bonaerense – donde ha recreado una porción selvática de su jardín secreto – como cuando regresa a sus orígenes a mirar las aguas del Paraná y narrar sus historias. No hay una polarización suficiente entre ciudad e isla. La poetisa escribe y recita y rememora igual de bien en ambos sitios. La película podría haberse terminado en su patio sin necesidad del viaje, que goza de algunas hermosas tomas del Delta, pero en definitiva nunca queda representado como “necesario”.