Arnold el Demoledor
El regreso de Arnold Schwarzenegger al protagónico exclusivo es bienvenido en una propuesta que posee todos los elementos del mejor cine de entretenimiento sin dudas. Metido en la piel de un sheriff que se ha retirado a trabajar sus últimos años en un pueblo donde reina tranquilidad y jamás ocurre nada, hasta que un poderoso "cartel" organiza el paso y fuga por el mismo de su mandamás capo para llegar a la frontera mejicana y así huir. El veterano actor -es un decir- mostrará otra vez su carisma para sus personajes implacables y duros, en una verdadera fiesta cinematográfica de vertiginosas escenas de acción, despliegue visual y acabada violencia, constituyendo un certero ejemplo de "pochoclero" estilo.
El muy buen realizador coreano Jee-woon Kim sabe como y donde meter los ingredientes exactos para crear una historia en apariencia simple de "Gato y ratón", llena de momentos graciosos y atractivos más un superlativo manejo del género. El espectador que la aprecie en la sala de un cine -el mejor sitio para verla por su estupenda fotografía- se hará del verdadero disfrute, sin obtener ni un solo minuto de respiro, afortunadamente.
Tomándose el pelo a si mismo -por su edad, su fama, etc- Don Arnold
se celebra si mismo como al cine que lo ha caracterizado desde épocas remotas con "Terminator" o sus "Conan". A su lado aparecen como buenos elementos de la aventura: Johnny Knoxville (Jackass), los malos importantes de Peter Stormare y el español Eduardo Noriega, el brasilero Rodrigo Santoro (300, Leonera -en Argentina-), la bellísima Génesis Rodríguez -hija misma del "Puma" José Luis- y sobre todo ese talento de Forrest Whitaker como el jefe de la Operación captura a cargo del FBI, y en un brevísimo momento el gran veterano Harry Dean Stanton.