Basada en la novela homónima de Jonathan Tropper, quien por cierto se encargó de escribir la adaptación cinematográfica, y dirigida por Shawn Levy, This Is Where I Leave You (en Argentina brillantemente traducida como “Hasta que la muerte los juntó”), es una de esas “dramedias” sobre personajes adultos en plena crisis de los 30-40, con todos los problemas que simplemente vivir trae consigo.
Cuando el patriarca de la familia Altman fallece, su última voluntad es que su viuda Hilary (la eterna peroquesemantienebastantebien Jane Fonda) reúna a sus 4 hijos bajo el mismo techo que los vió crecer y efectuar una ceremonia judía (el Shivá) durante una semana entera. Es así que cada uno de los integrantes va llegando con su equipaje emocional, encabezados por Judd (Jason Bateman), que está en pleno trámite de divorcio tras encontrar a su mujer encamada con su jefe; Wendy (Tina Fey) con su bebé y el forro de su marido; Paul (Corey Stoll), el hijo mayor encargado del negocio familiar, y por último Phillip (Adam Driver), el menor de los cuatro que obviamente está en cualquiera porque los hijos menores siempre están en cualquiera (?). Además se suman algunos nuevos y viejos amores/amigos de la infancia, como Penny (Rose Byrne, la de Insidious y Neighbors), Tracy (Connie Britton, de la primer temporada de American Horror Story) y Horry (Timothy Oliphant, de la serie Justified).
Una vez reunidos todos tras bastante tiempo sin verse, comienzan a salir a la luz los mambos personales de cada uno: Judd sigue con dificultades para asumir su separación hasta el punto que se lo oculta a su familia, Wendy se reencuentra con el gran amor de su vida (Horry) y se siente culpable por haberlo abandonado luego de que ambos sufrieran un accidente automovilístico y él quedara con lesiones cerebrales (¡buena mina, eh!), Paul se disputa el manejo de la tienda familiar y tiene a su esposa apurada por quedar embarazada cuanto antes, y Phillip está metido con una mujer mayor y adinerada (Tracy, su psicóloga) y nadie lo toma en serio. Ah, y Hilary, la madre de todos ellos, se acaba de hacer las gomas y no tiene problema alguno en contar a medio mundo en pleno velorio sobre el enorme pene de su marido.
This Is Where I Leave You nos habla sobre los errores cometidos, la actualidad insatisfecha, esos viejos y profundos amores que no se terminan de concretar pero te marcan para siempre, el miedo a arriesgarse, los recuerdos familiares y la incertidumbre del futuro. Todos temas que, de acuerdo la edad que tengas, te pueden "llegar" en mayor o menor medida.
El elenco completo: parece que les gusta bastante estar sentados.
Foto gentileza de Entertainment Weekly (siempre quise decir eso)
Como habrán visto, el reparto es más que interesante y variopinto. Shawn Levy (Night At The Museum, Real Steel) no se caracteriza precisamente por ser un gran director, sino que más bien es de mitad de tabla, por eso le salvan las papas actores consagrados en la comedia y la precisión de su timing, como Jason Bateman (Arrested Development, Horrible Bosses) y Tina Fey (SNL, 30 Rock); si bien Bateman repite su típico rol de tipo centrado que siempre trata de mantener todo en orden y en equilibrio, en esta oportunidad tanto él como Tina reducen bastante su cuota habitual de sarcasmo y ácidos one-liners. Respecto al resto, destaca Adam Driver por ser el inmaduro y bardero de la familia; aunque Jane Fonda tampoco se queda atrás en sus escenas de madre "open mind".
Quizás justamente por ese lado viene uno de los problemas de la peli: son tantos personajes, y cada uno con sus problemas e inseguridades, que por más que Levy lo intente no todos tienen “su momento” de brillar. Obviamente el protagonista es Bateman, por ello hay algunas historias y sub-tramas que quedan medio colgando, aparecen en una o dos escenas y después apenas se las menciona: la historia de Wendy con su primer y fallido amor, Horry, es probablemente la más emotiva y sensible de todas… y sin embargo la “resolución” (nótese las comillas) es demasiado “Ah, bueno… ¿listo, ya está?”.
Ésta sólo la agregué porque me encanta Rose Byrne, es hermosa ^_^
(ah, y porque acá suena uno de mis temas favoritos de Cyndi Lauper)
Pero tal vez de eso también se trate: que no siempre las historias en nuestra vida tienen un cierre definitivo, sino que hay muchas postergaciones, muchos retrasos, muchas sorpresas (“Anything can happen all the time” dice Penny), la incómoda sensación de que no siempre tomamos la decisión correcta ó, peor aún, que no siempre hay marcha atrás. Pero pase lo que pase, la familia siempre tiene que estar ahí firme para “bancarse” unos a otros. Como ratifica Wendy luego de defender a sus hermanos de la policía: “You guys are idiots. But you are MY idiots”.
This Is Where I Leave You (Hasta que la muerte los juntó) tiene sus buenos momentos, sean emotivos o divertidos, y se deja ver con tranquilidad. Tal vez no sea LA comedia dramática que podría haber sido, pero sin dudas cuenta con un gran elenco que sabe lo que hace... aún cuando los personajes que interpretan, como puede pasarnos a cualquiera de nosotros, a veces no tienen la más pálida idea de dónde están parados.