Para ser la primera comedia apta para mayores del director Shawn Levy, This Is Where I Leave You es una apuesta a lo seguro, en un terreno donde no hay mucho espacio ya para explorar. Hace menos de mes y medio que The Judge, el vehículo de lucimiento para Robert Downey Jr., desfiló con un argumento parecido en las salas y ahora es el turno de este elenco de primer nivel, para una comedia dramática que trabaja con lo que tiene a su disposición pero que no trasciende la cotidianidad de su trama.
Tras la tópica muerte del patriarca de la familia, los hermanos Altman deben reunirse en su hogar para celebrar durante una semana la ceremonia religiosa judía del Shiva. Cada uno trae sus disfunciones propias bajo un mismo techo, desde el frustrado protagonista de Jason Bateman hasta el insoportable hermano menor de Adam Driver, pasando por los poco desarrollados hermanos restantes, interpretados por Tina Fey y Corey Stoll. Como es de esperar, más de un trapito saldrá al sol y los hermanos deberán soportar más de una situación incómoda, todo mientras lloran a su difunto padre.
Comedias dramáticas como ésta llueven cada año, ya sea un producto independiente o uno de un gran estudio como el presente. Familias sin hijos, familias con hijos, problemas maritales, amores adolescentes no correspondidos, no hay tema que no quede sin revolver ni explorar. El problema de This Is Where I Leave You no es el material de donde proviene, el libro de Jonathan Tropper, quien firma el guión. El problema es que la trama remite a problemas cotidianos que han sido explorados en el pasado -y con mayor éxito- dejando la dura tarea de subsanar una historia trillada a un elenco que no tiene mucho que hacer contra los estereotipos. Bateman vende a su compungido Judd con su usual apatía, Jane Fonda la descose como la sensual y desenfadada matriarca, y Rose Byrne ilumina la pantalla con su candidez y ligereza. Todos funcionan muy bien juntos y salen bien parados de escenas cómicas, pero por separado sus historias propias hacen aguas. Fey está muy desaprovechada como una madre infeliz con su matrimonio y que todavía tiene sentimientos por su vecino -Timothy Olyphant- mientras que Stoll debe ponerse los pantalones para con el negocio familiar, a la vez que se los saca para intentar dejar embarazada a su ansiosa esposa. Driver, por lo pronto, vuelve a repetir esquemas con su hiperactivo adulto joven que ya muy bien hizo en la serie Girls, pero que poco a poco va agotando la paciencia con sus salidas histriónicas.
Hay tantos personajes en pantalla y todos tienen algo para contar, que al final ese peso estelar termina tirando abajo el justo equilibrio entre comedia y drama. Si hasta ese rabino joven termina agotando con su repetitivo chiste vulgar. This Is Where I Leave You es un interesante paso hacia pasturas más maduras del director, pero repite esquemas a diestra y siniestra. Ideal para un día lluvioso.