Un hombre siente que tiene su última oportunidad con una boleta de Lotería.
Este film es la ópera prima de Andrés Edmundo Paternostro (49) una comedia con toques de thriller y policial que comenzó a gestarse en el 2002, fue presentado a principios de 2013 en el festival Pantalla Pinamar, donde tuvo muy buena recibimiento.
Esta historia podría ser la de cualquiera, el protagonista Pablo (Damián de Santo) tiene una vida normal, tranquila sin demasiados sobresaltos, pertenece a la clase media Argentina, le alcanza para llegar a fin de mes pero un día pierde su trabajo y toda su vida se derrumba. Comienza a suceder todo lo que trae aparejado la falta de dinero y su esposa que era todo amor lo abandona y se lleva a sus dos hijos Matías y Carina. Ahora cuenta solamente con las visitas compartidas, pero parece que a su ex solo le interesa el dinero que le trae y no los puede ver.
En su trabajo actual su jefe le hace su vida más difícil, cuando sale de su casa su auto se descompone, en el colectivo nadie lo ayuda con las monedas, llega a una entrevista solamente diez minutos tarde y ya la persona no lo atiende, así una serie de vicisitudes. Al terminar su vida llega a su casa, lleno de deudas y con su heladera vacía como su alma y se da cuenta que a nadie le importa nada; algo similar al film "La suerte está echada" (2005) cuyos protagonistas eran Pauls y Mazzarello.
Lo invaden los recuerdos, se siente solo, envuelto en una fuerte depresión, para ponerle fin a todos sus fracasos intenta suicidarse ahorcándose, pero ni eso le sale bien, se cae y encima de él algunos muebles, en ese momento queda desmayado sueña con seis números (6-10-30-22-12-27) pero esto no termina ahí, mediante una serie de malabares para juntar el dinero compra “La boleta” pensando en un golpe de suerte, lo toma como un mensaje divino. Parece Jettatore cuando sale de la agencia aparecen dos pibes le roban todo incluyendo la boleta y para recupérala se mete en la villa.
A partir de ese momento comienza a suceder una serie de hechos disparatados, muy divertida y alocada, con mucha acción, un thriller con toques de comedia, hasta no falta el folklore relacionado con el fútbol, tiene muchas cosas nuestras, incluyendo el vocabulario, mantiene el ritmo y nunca decae, entretiene, aborda el grotesco, con un elenco increíble, incluso los actores secundarios, llena de personajes caricaturescos y colorida. Uno de los personajes es similar a Tony Montana (personaje de Al Pacino en Caracortada) pero más exagerado, y por momentos tiene un estilo al video clip o a un corto publicitario.
Allí esta Roly Serrano, como Don Nino un delincuente que es algo desastroso y que armó un secuestro express ayudado por los dos jóvenes que le robaron a Pablo, estos son inexpertos y torpes; Marcelo Mazzarello es Rocky, algo tonto pero con un corazón de oro y que quiere ayudar al protagonista; Claudio Rissi como Merlín, jefe y dueño de la villa, se vincula con la delincuencia, las drogas y la prostitución; Ricardo Bauleo un cura muy particular; el protagonista Damián De Santo cuenta con una gran frescura y su personaje es similar a los que interpreta en la televisión, sigue la línea de esta locura y con un claro mensaje esperanzador. Y como ya nos vienen acostumbrando varias películas dentro de los títulos hay escenas extras.