El costo de enfrentar a la injusticia
Nueva película del director Stéphane Brizé con su actor predilecto Vincent Lindon, después de El precio de un hombre, Algunas horas de primavera y Una Affaire D’amour. Aquí los vemos en una historia mucho más social, donde Lindon interpreta a Laurent, un hombre que encabeza la lucha de sus compañeros despedidos de una fábrica de autopartes alemana radicada en Francia.
La trama recorrerá la puja de Laurent y los sindicalistas, para poder lograr reuniones con los más altos directivos de la empresa para poder reincorporar a todos los trabajadores. El conflicto llega cuando algunos de los afectados empiezan a considerar aceptar la indemnización que quieren darles, y así lograr un quiebre en el núcleo de los protestantes, para poder así disolver al numeroso grupo.
La propuesta francesa se basa básicamente en tomas de las manifestaciones, charlas de sindicato y las negociaciones de los jefes con sus empleados. Lo bueno que al enfocarse solamente en eso, la expectativa que se quiere crear en el espectador para que también sea parte de esta manifestación, logra formarse y uno va tomando partido por lo que está viendo. Al ser una situación social tan parecida al presente que vivimos aquí y en muchos países de Latinoamérica, uno logra empatizar por los sucesos que pasan en la pantalla.
Lo mejor es prácticamente la actuación Lindon y su personaje. La desesperación que va recorriendo Laurent, al enfrentarse no solo a los corporativos sino también a sus propios pares, es algo que logra destacarse con el gran trabajo de actuación del actor francés. Sus miradas, sus discursos motivacionales y el carácter de líder nato que le otorgó a este trabajador desdichado, es impresionante.
La guerra silenciosa es un gran film político-social que supo pasar por la Competencia Oficial del Festival de Cannes en el año 2018 y que ahora llega a los cines de Argentina. Es ideal para los que siguen la interesante filmografía del director Stéphane Brizé y también para los amantes del cine francés.