Una historia potente acerca de la relación enfermiza entre madre e hijo.
La película cuenta la historia de una familia de clase alta, los nuevos ricos, Cornelia Keneres (Luminita Gheorghiu) es arquitecta y escenógrafa, casada con un médico y está muy bien vinculada con políticos y otros personajes importantes, tiene una fuerte personalidad, absorbente, dominante y totalitaria, a la hora de organizar celebraciones lo hace a lo grande, y vive pendiente de la vida de su hijo Barbu (Bogdan Dumitrache), quien a su vez no se encuentra en la misma situación, dado que le gusta vivir libremente y tiene cerca de 40 años. Tiene un amor maternal asfixiante, en todo momento demuestra que lo único que le interesa en la vida es su hijo y como suele suceder en estos casos a cualquier mujer que se le acerque ella no la aceptará y le parecerá poco su adorable Barbu.
Pero toda su vida formidable se desbarranca cuando se entera que su adorado Barbu acaba de sufrir un accidente en la carretera; él está bien, pero atropelló a un niño humilde de 14 años cuando cruzaba y ha muerto, lo someten a distintos controles y entre ellos el de alcoholemia, resta descubrir si hubo imprudencia por parte del conductor y qué responsabilidad tiene en la muerte. A partir de ese momento su madre mueve todas sus influencias y dinero para que su hijo no vaya a la cárcel, logra que cambien la declaración del testigo, interviene en la investigación policial; esta mujer se transforma en un monstruo, en una leona, pero también sufre y padece.
El film muestra la relación enfermiza entre madre e hijo, los estados mentales, los sentimientos, las pasiones, la desesperación y la cámara en mano muestra el nerviosismo y las perturbaciones de las distintas situaciones, con diálogos y planos inteligentes. Este es un drama psicológico con una buena fotografía (Andrei Butica), escenas casi teatrales y con toques que se asemejan a la tragedia griega, el título del film está muy relacionado con su narración, las actuaciones Luminita Gheorghiu, Bogdan Dumitrache, son sublimes y el resto del elenco también se destaca. Esta película del rumano Calin Peter Netzer el año pasado ganó el Oso de Oro de la Berlinale.
Recordemos que algunas películas del cine rumano tocan temas relacionadas con el dictador Nicolae Ceaucescu y su época, abordando temáticas como: el aborto clandestino “4 meses, 3 semanas, 2 días” (2007) de Cristian Mungiu, sobre la arbitrariedad “Policía, adjetivo” (2009) de Corneliu Porumboiu, la burocracia “Bucarest 12:08” (2006) la corrupción, entre otras.