Matando la acción
El realizador neozelandés Andrew Dominik vuelve al ruedo luego de su memorable film El asesinato de Jesse James por el cobarde Robert Ford (2007), esta vez en un policial vinculado a los oscuros negocios de las apuestas y juegos clandestinos.
Brad Pitt (quien también trabajara en El asesinato de …) interpreta a Jackie Cogan, un matón profesional que es convocado para investigar si un robo durante un juego de póker (organizado por la mafia) fue una posible estafa o un verdadero atraco.
El propio director es quien se ocupó de adaptar la novela de George V. Higgins, Cogan’s Trade, que recorre la historia de estos dos asaltadores de poca monta, organizado por uno de mayor experiencia.
Todo el relato transcurre de manera armoniosa, sin demasiados sobresaltos y los pobres enredos son tapados por discursos de campañas presidenciales, dando un tinte político a un argumento nada novedoso.
Las interpretaciones son correctas, con un desfile de actores como Ray Liotta (Más allá del cielo), en el papel del dueño de la casa de juegos, Richard Jenkins (Diario de un seductor ) como el contratista y James Gandolfini (Los Soprano)interpretando a un matón algo irritable, pero a la vez, muy sentimental.
Mátalos Suavemente no aporta demasiados a la carrera de Domink, sólo pasa suavemente, sin hacer ruido.