El gigante quiso ser un héroe
"Ralph el demoledor" no quiere romper nada más, no quiere ser un malo, sino un héroe. El filme reúne la perfección formal con la originalidad temática.
Pudo pasar que Barbie no quisiera ser una señorita sexy. O que la muñeca Mariquita Pérez no hubiera querido ser, como la argentina Marilú, una muñeca tradicional en España. "Ralph el demoledor" no quiere romper nada más, no quiere ser un malo, sino un héroe. ¿Qué pasaría en el mundo de los juguetes antes y ahora, en Estados Unidos, España o la Argentina? Serían juguetes en rebeldía y estallaría el conflicto.
Justamente de eso se trata el filme del director y guionista Rich Moore, de un personaje de video-juego que no quiere ser más el que era. Basta de destruir, por qué ser odiado y no tener la posibilidad de ganar una medalla por arreglar todo como Felix Jr, su opuesto en el juego!.
Se ve que los animados llegaron a la mayoría de edad y se replantean su identidad. Justamente otros personajes de "una película de miedo" como "La cabaña del terror", que también se estrena hoy, también protestan porque otros los inducen a hacer determinadas cosas, que ellos no siempre querrían.
Sí. La Disney se aggiorna desde que compró Pixar y sus héroes se rebelan y conflictúan, algunos de estos ejemplos son: los juguetes de "Toy Story", la chica de "Valiente", o el pequeño "Wall- E".
PERFECCION FORMAL
Ralph con un grupo de monstruos de los videojuegos se sientan en la ronda presidida por un analista y plantean sus problemas. Pero el demoledor, estalla. Más cuando lo discriminan en el cumpleaños de la empresa para la que trabaja. Entonces se escapa de su juego y trata de meterse en otros, con los consiguientes problemas.
"Ralph el demoledor" reúne la perfección formal con la originalidad temática. Porque la idea de la huída, presupone un pasaje por la historia de los videojuegos, de su diseño estético y su evolución, desde los arqueológicos de los instalados en centros comerciales (comparemos los lejanos nuestros en la Sacoa marplatense), hasta los actuales en red. Y Ralph prueba en distintos mundos del video juego, como en su acercamiento a la Sargento Calhoum, demasiado violenta para él, o en su relación con la pequeña Vanellope Von Schweetz con la que vivirá la aventura en el mundo de caramelo.
Divertida, arriesgada, "Ralph el demoledor", asombra con su perfección técnica e incorpora un nuevo antihéroe a la lista de protagonistas del filme animados.